La Guardia Civil arrestó a dos hermanos en Sonseca tras un operativo que detectó comportamientos sospechosos en vehículos de alta gama. Se encontraron 25 kilos de cocaína y metanfetamina, valorados en 875.000 euros. Además, se confiscaron los coches y teléfonos móviles de los detenidos, acusados de tráfico de drogas.
En la localidad de Sonseca, durante un operativo policial destinado a identificar vehículos y sus ocupantes, la Guardia Civil ha arrestado a dos individuos. Los agentes notaron que dos coches de alta gama, al darse cuenta de la presencia de las fuerzas del orden, disminuyeron la velocidad de manera inusual y coordinada. Este comportamiento levantó sospechas entre los policías, quienes optaron por detenerlos debido a que no reconocían a los ocupantes.
Al principio, los dos conductores, mostrando una aparente disposición a seguir las instrucciones de los agentes de la Guardia Civil, se detuvieron. Esto generó la impresión de que estaban dispuestos a colaborar, aunque su actitud nerviosa era evidente. Sin embargo, en un momento inesperado, decidieron intentar escapar. Esta acción fue rápidamente impedida por los miembros de las patrullas, quienes ya estaban atentos ante la posibilidad de que intentaran realizar tal maniobra.
Los integrantes de la Guardia Civil procedieron a identificar a los pasajeros de ambos vehículos. Les solicitaron que abrieran el maletero, tras lo cual inspeccionaron meticulosamente cada uno de los compartimentos. En uno de ellos, encontraron una maleta y un bolso de viaje, que contenían en su interior un total de 25 paquetes envasados al vacío, característicos de las sustancias ilícitas.
Posteriormente, se les realizaron los correspondientes droga-test disponibles para la Guardia Civil, los cuales resultaron positivos para cocaína y metanfetamina. El peso total de las sustancias halladas fue de 25 kilos. Como resultado de estas pruebas, se procedió a la detención de los dos hombres que conducían los vehículos, quienes resultaron ser hermanos.
Se les atribuyeron a los detenidos delitos relacionados con la salud pública, específicamente por el tráfico de drogas que provocan un grave daño a la salud.
Se estima que el valor de la droga confiscada, que posee una alta pureza, podría llegar a 875.000 euros. En el mercado negro, su precio por gramos podría superar los 1.525.000 euros, e incluso más, después de ser sometida a procesos de corte y adulteración en laboratorios clandestinos.
La Guardia Civil ha comunicado en un informe de prensa que, además de la droga, se confiscaron los dos vehículos de alta gama que se emplearon para el traslado, así como dos teléfonos móviles pertenecientes a los detenidos.
La entrega de la droga se realizó en el Servicio de Sanidad de la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha, donde se llevará a cabo su análisis y custodia.
El trabajo ha sido llevado a cabo por miembros de Seguridad Ciudadana de la Compañía de Mora, mientras que las gestiones han sido dirigidas por integrantes del Equipo Territorial de Policía Judicial de Mora.