En este primer lote de distribución, se han adjudicado a la Comandancia albaceteña dos PEI de la marca Taser, que ya forman parte del equipamiento policial de los guardias civiles que han realizado el curso de formación específica que les habilita para su uso, según ha informado la Guardia Civil en nota de prensa.
Estas primeras pistolas eléctricas se han adjudicado a la Usecic, al ser la principal unidad que se enfrenta a situaciones más conflictivas. A partir de la experiencia en esta unidad, se procederá a extender su uso de manera progresiva en otras unidades de la Comandancia.
Las PEI constituyen un nuevo medio que se integra en el esquema de intervención operativa de la Guardia Civil que se implantó en 1998 y se fundamenta en el uso gradual de la fuerza.
INCAPACIDAD TEMPORAL DE MOVIMIENTOS
Este tipo de pistolas táser son una solución alternativa al arma de fuego, puesto que al ser un arma no letal sirve para afrontar situaciones de enfrentamiento directo con personas agresivas que pongan en riesgo a los ciudadanos como a los propios guardias civiles, cumpliendo una doble función, disuasoria en un primer momento y de contención de la amenaza en un estadio posterior.
Estas pistolas, en vez de proyectar una bala, disparan un cable que se engancha en la ropa produciendo unos pulsos eléctricos que interceptan la comunicación del cerebro con el resto del cuerpo, de manera que el individuo que debe ser reducido es incapaz de realizar ningún movimiento, sin que por ello se le produzcan daños colaterales.
Las situaciones más habituales en las que se usará este tipo de armas serán cuando exista un peligro cierto para la vida o integridad físicadel agente o de terceras personas.
GRABACIÓN DE LAS INTERVENCIONES
El equipamiento de estos nuevos dispositivos no letales incorpora un sistema de grabación de la actuación que permite documentar gráficamente, a través de una cámara personal 'AXON body2', las intervenciones en las que se utilicen estas armas, con el fin de garantizar la seguridad jurídica de los guardias civiles y de todos los ciudadanos, garantizando que se cumple la normativa que ampara su utilización
La primera intervención realizada con esta pistola no letal tuvo lugar hace unos días en la localidad albaceteña de Casas Ibáñez, cuando al intentar detener a una persona por un delito de violencia de género, esta se atrincheró y amenazó a los agentes con un hacha, al tiempo que se autolesionaba con la misma y encendía una hoguera amenazando con rociarse el cuerpo con líquido inflamable para tirarse en ella y provocar un incendio.
Ante la violencia y peligro que generó, se movilizó la Usecic, que entró en fuerza en la estancia donde se encontraba y utilizando la PEI logró detener al individuo, apagar el fuego y con ello anular el peligro que se había generado sin poner en riesgo la vida de esta persona. El detenido fue trasladado a un centro médico para evaluación de sus heridas y posteriormente puesto a disposición judicial.
Con este nuevo equipamiento la Guardia Civil avanza en la actualización y modernización de sus medios, que, en este ámbito concreto, supone la incorporación de las más novedosas tecnologías de intervención operativa en beneficio de la seguridad y protección de la ciudadanía.
Estos avances, además de implementar nuevas capacidades operativas, implican un incremento en la seguridad jurídica y personal de los agentes en aquellas actuaciones de alto peligro, como muestra del compromiso constante del Cuerpo por adecuarse a la normativa y doctrina vigentes para ofrecer la máxima protección de los derechos y libertades de los ciudadanos.