Las pesquisas comenzaron el pasado mes de marzo, tras detectarse un fuerte olor a esta sustancia que emanaba del interior de una vivienda de dicha localidad. Avanzada la investigación, los agentes pudieron determinar que además se estaba produciendo defraudación del fluido eléctrico.
Por todo ello, el pasado mes de mayo se efectuaron dos registros en domicilios colindantes, donde se localizó una plantación en el sótano de uno de ellos, a la cual se accedía a través de un agujero oculto bajo el sofá del salón. En total los agentes intervinieron 144 plantas, 103 plantones y tres kilos de esta sustancia ya recolectados.
Finalmente, la Policía madrileña procedió a la detención de cuatro personas como presuntos responsables de un delito contra la salud pública y un delito de defraudación de fluido eléctrico. Se trata de jóvenes de 19, 23, 26 y 27 años, tres españoles y un portugués, y dos de ellos con antecedentes.