Es también un buen día para tomar conciencia y poner nombre a las cosas. Vivimos en una sociedad enormemente desigual. La peor, la injusticia económica que pone a niños y niñas en la pobreza, pero también traigo aquí, en este Día, la intolerable desigualdad de quienes distinguen entre hombres y mujeres y nos añaden cargas o descargan su criminal violencia.
Las enfermeras somos un colectivo mayoritariamente de mujeres. Y somos conscientes de lo que cuesta cambiar una imagen profesional estereotipada, con menor valía y desenfocada de unas sanitarias ayudantes, con poca responsabilidad y menor ciencia. Estamos en ello. Cada una, en cada puesto de trabajo aporta ladrillos en la construcción de la imagen que hoy proyectamos como profesionales cualificadas de las ciencias de la salud que llevan la función del cuidado a un ejercicio científico y humanista para las personas. Esperamos que nos veáis así.
Tenemos, como todas, que enfrentar machismos. Quedan retos y dificultades en la conciliación de la vida personal y familiar con el desarrollo profesional y el desempeño laboral. Unidas, debemos exigir recursos concretos a los gobernantes. Sabemos que, en algunos sectores nuestro empleo se retribuye de manera desigual y lo denunciamos. Identifiquemos los muros determinantes de que "los jefes" sean generalmente ellos y nos representen.
Mujeres enfermeras al lado de las mujeres que sufren violencia, seremos implacables en la detección y denuncia de estas situaciones.
Nos comprometemos a saber más, a estar más presentes y a cuidar mejor.
CONCHA PIQUERAS RAMOS
PRESIDENTA COLEGIO DE ENFERMERÍA DE ALBACETE