Fue un agente que se encontraba disfrutando de su día libre el que conoció que un trabajador de dichas instalaciones había sido agredido y le habían sustraído 100 euros en efectivo y un smartphone, además de sufrir lesiones, según han informado fuentes del Instituto Armado.
Los presuntos autores fueron arrestados, uno en Arenas de San Pedro dos días después, y cuatro jornadas más tarde el otro en Talavera de la Reina (Toledo).
Los arrestados poseen antecedentes penales y uno de ellos ha estado ya en prisión con anterioridad.