Desde hacía unos meses, la Paprona de la Guardia Civil de Alcaraz incrementó sus vigilancias en parajes donde tenían conocimiento de que algunas personas se estarían dedicando a la captura de pequeñas aves silvestres mediante el uso de artes prohibidas, concretamente con liga o pegamento impregnado en acículas de pino y ramas pequeñas.
Tras la identificación del autor de este tipo de arte de caza, actualmente prohibida, la Guardia Civil, ha informado en nota de prensa, consiguió liberar un ejemplar de jilguero joven (Carduelis Carduelis), cuyo plumaje había sido limpiado recientemente del pegamento por el que había quedado atrapado, interviniéndole en ese momento un tubo del pegamento utilizado para su captura.
Estas aves, de pequeño tamaño, no se encuentran incluidas entre las especies cazables, por lo que gozan de un régimen de protección genérico en consonancia con la Directiva Aves 2009/147/CE, la Ley 42/2007 de Patrimonio Natural y Biodiversidad. Esta especie de aves tiene un gran valor por su empleo en silvestrismo para concursos de canto.
El uso de la liga como arte de caza se encuentra totalmente prohibido, al igual que las redes abatibles, los venenos, cepos, lazos sin tope o jaulas trampa sin homologar, entre otros, no sólo porque se produce un gran sufrimiento y agonía al animal capturado como es el caso de los cepos, sino también porque al tratarse de métodos no selectivos, cualquier animal puede quedar atrapado en ellos incluyendo los pertenecientes a especies amenazadas, ocasionando un daño irreparable para la fauna.
Las diligencias instruidas por efectivos de la Paprona de Alcaraz, por un delito contra la flora y fauna y los animales domésticos, han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción número 1 de Alcaraz.