Un policía fuera de servicio evita que una pareja robe a un empresario de Valdepeñas (Ciudad Real) cuando salía de un banco

Cuando la víctima salía de una sucursal bancaria tras realizar un importante reintegro de efectivo.

Un policía nacional, que se encontraba fuera de servicio, se percató de la presencia de los dos autores y observó que se comunicaban utilizando auriculares y llevaban a cabo una vigilancia a un empresario al que previamente habían colocado un "clavo" en una de las ruedas de su furgoneta, que había dejado estacionada junto a la sucursal.

En nota de prensa, la Policía Nacional ha informado de que cuando la víctima inició la marcha tras abandonar la entidad bancaria, se produjo el pinchazo en la rueda trasera del vehículo, pero sin embargo los delincuentes no pudieron llevar a cabo el robo puesto que intervino el agente libre de servicio que, junto con el apoyo de policías uniformados, procedieron a su detención y traslado a dependencias policiales.

A los detenidos, que tienen numerosos antecedentes por hechos similares, se les acusa de un delito de hurto en tentativa por el método del pinchazo.

El conocido como 'método del pinchazo' consiste en vigilar a una potencial víctima cuando acude a una entidad bancaria en su vehículo y, mientras se encuentra haciendo reintegros de efectivo, se le coloca un dispositivo de punta hueca con soporte de goma (denominado 'pincho') para pinchar o desinflar una de las ruedas del mismo.

Cuando la víctima retorna al vehículo e inicia, se percata del problema y se baja a solucionarlo, dejando las puertas abiertas y los efectos personales dentro del coche, convirtiéndose en una potencial víctima que se ve desbordada por la situación, circunstancia que aprovechan los ladrones para apoderarse del dinero y efectos.

Además, ambos arrestados portaban varios billetes de dinero de curso legal, lo que hace sospechar a los agentes que también pudieran dedicarse al hurto por el método de 'la siembra'. Esta modalidad delictiva consiste en arrojar los billetes a los pies de la víctima en el momento en que ésta se encuentra realizando una extracción en el cajero, para así llamar su atención y sustraer el dinero de la máquina cuando la víctima se agacha a recoger los billetes que pensó se le habían caído previamente.