Según señala el escrito de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press, los hechos ocurrían el 11 de septiembre de 2018 sobre las 8.00 horas, cuando la acusada, mayor de edad y con antecedentes penales no computables, tras haber mantenido una discusión verbal con su expareja sentimental, R.R.G., le propinó un mordisco en la oreja izquierda.
Con este acto, la acusada le produjo lesiones consistentes en herida con arrancamiento parcial de la parte inferior del pabellón auricular izquierdo, por lo que requirió para su sanidad de un tratamiento quirúrgico de aproximación de los bordes de la herida, con sutura monofilamento no absorbible y curas diarias.
En consecuencia, a R.R.G. le ha quedado como secuela la pérdida de sustancia en el pabellón auricular izquierdo, con asimetría respecto a la oreja derecha, produciéndole un importante perjuicio estético.
Por ello, el Fiscal considera que los hechos constituyen un delito de lesiones con deformidad, por el que le piden a S.P.S. cuatro años de prisión y la indemnización a R.R.G. en la cantidad de 1.025 euros por las lesiones causadas.