Una parte de la afición del Rayo, la situada en el único fondo del estadio, cantó en reiteradas ocasiones durante la primera mitad 'Roman Zozulya puto nazi'.
Los cánticos provocaron que el árbitro parara el partido durante unos instantes en la primera mitad para que se pidiera por megafonía el cese de los insultos.
La historia de Zozulya con el Rayo se remonta a enero de 2017, cuando el ucraniano llegó cedido por el Betis. Unos días después de anunciarse su incorporación se marchó de regreso a Sevilla sin debutar ni entrenarse con sus nuevos compañeros debido al rechazo que mostró la afición vallecana por él, al que le acusaron de "filiación nazi".
Al descanso se llegó con empate a cero goles y con el Alba con un hombre menos por expulsión en los últimos minutos de la primera parte de Silvestre.
Federación y árbitros, de acuerdo
El partido entre el Rayo Vallecano y el Albacete se suspendió en el descanso por consenso y "sin fisuras" entre el árbitro José Antonio López Toca y la Real Federación Española de Fútbol, debido a que "no se daban las condiciones necesarias" para jugar por los insultos recibidos por Román Zozulya, según desveló Víctor Varela, vicepresidente del conjunto manchego.
Una parte de la afición del Rayo, la situada en el único fondo del estadio, cantó en reiteradas ocasiones durante la primera mitad 'Roman Zozulya puto nazi'.
Los cánticos provocaron que el árbitro parara el partido en dos ocasiones durante unos segundos en la primera mitad para que se pidiera por megafonía el cese de los insultos. Ante la reiteración de los cánticos ofensivos, la segunda parte no se disputó.
"La decisión de suspender el partido la ha tomado el árbitro junto con la Real Federación Española de Fútbol, pero hay que decir que hemos contado con el apoyo de la Liga y el Rayo", dijo Varela, que destacó que con esta decisión se opta por "defender la integridad de las personas y los deportistas".
"Defendemos los valores del deporte y desde el Albacete estamos a favor de la suspensión, porque no se daban las condiciones para jugarse", confesó Varela.
Según el dirigente del equipo manchego Román Zozulya llegó "al vestuario afectado porque ha sido una situación dura para él".
"Desde que llegó al club ha tenido un comportamiento ejemplar, es un buen futbolista y quiero que pueda jugar sin tener ningún tipo de presión", señaló.
Ahora, tras la suspensión del partido al descanso, se tendrá que decidir qué ocurre con los segundos cuarenta y cinco minutos.
"La determinación la tiene que tomar la federación, pero no tenemos inconveniente en jugar los 45 minutos que quedan si se garantiza la integridad", concluyó Varela.