La semana pasada, la Comunidad de Regantes de Balazote-La Herrera recibió, por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, las obras de una planta solar fotovoltaica flotante. Esta iniciativa se realizó con una inversión superior a los tres millones de euros.
Este proyecto tiene como objetivo la implementación de energías renovables a través de paneles fotovoltaicos flotantes, y se espera que beneficie a un total de 445 regantes que cultivan 5.580 hectáreas. Los municipios involucrados en esta iniciativa son Balazote, La Herrera y Lezuza, ubicados en la provincia de Albacete.
Durante este evento, José Juan Fernández, quien ocupa el cargo de director general de Desarrollo Rural en la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, subrayó que la instalación de esta planta solar fue factible gracias a la iniciativa que el Gobierno de Castilla-La Mancha presentó al MAPA. Esta propuesta se realizó mediante la Sociedad Mercantil Estatal de Infraestructuras Agrarias (SEIASA) con el objetivo de utilizar fondos MRR para la modernización de los regadíos en la región.
“Como resultado de esta gestión, y gracias a la colaboración entre ambos gobiernos, España y Castilla-La Mancha, así como a los Fondos Next Generation, el Ministerio eligió en junio de 2021 cinco expedientes de modernización de regadíos en Castilla-La Mancha dentro de su Plan para mejorar la eficiencia y sostenibilidad en este ámbito. Uno de estos proyectos es el que fue entregado a la Comunidad de Regantes de Balazote-La Herrera”, afirmó el director general.
Una inversión de 44,85 millones de euros es la que respaldan estos cinco proyectos, gracias al apoyo del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, mediante SEIASA. Además, alrededor de seis millones de euros en ayudas son proporcionados por el Gobierno de Castilla-La Mancha, con el objetivo de facilitar la inversión a estos regantes “para que les sea menos dificultosa la inversión”.
El director general ha destacado que estas inversiones generarán un triple beneficio, ya que ayudarán a mejorar la eficiencia energética, disminuir la factura de electricidad para los regantes, lo que conlleva un ahorro en los costos, y finalmente, promoverán un uso más eficiente del agua destinada al riego. En este contexto, José Juan Fernández ha expresado que “desde el Gobierno del presidente García-Page, consideramos imprescindible incentivar las inversiones en infraestructuras que supongan una modernización de regadíos y que permitan ahorrar agua, para conseguir tanto el buen estado de las masas de agua como la utilización responsable de los recursos naturales”.
Finalmente, el director general de Desarrollo Rural ha enfatizado que una de las comunidades autónomas que menos agua utiliza para riego en España es Castilla-La Mancha, con un porcentaje que se sitúa un 5,5 por ciento por debajo de la media nacional. En este sentido, “el Gobierno de la región tiene el firme compromiso tanto con el regadío como con la mejora del uso del agua, compromiso que se ha traducido en que actualmente se están ejecutando modernizaciones y transformaciones por importe de 34,6 millones que van a suponer una inversión de más de 40 millones de euros”.