Cuenca

25 detenidos y 460 kilos de cocaína incautados en la lucha contra el tráfico de drogas en Europa y que afectaba a la provincia de Cuenca

Redacción / Agencias | Martes 19 de noviembre de 2024
Una operación conjunta entre la Policía Nacional, la Polícia Judiciária de Portugal y Europol desmanteló una organización criminal conocida como "narcos del cielo", que planeaba introducir toneladas de cocaína en Europa. Se detuvieron 25 personas y se incautaron 460 kilos de droga, dinero y bienes valorados en más de 2 millones de euros.

Gracias a una operación coordinada entre la Policía Nacional, la Polícia Judiciária de Portugal y Europol, se ha logrado desmantelar una organización delictiva conocida en el ámbito policial como los "narcos del cielo". Esta banda estaba implicada en la planificación para introducir toneladas de cocaína en Europa mediante el uso de aviones privados, utilizando para ello la financiación proporcionada por empresarios chinos.

La reciente operación ha resultado en la detención de 25 individuos, de los cuales 19 fueron capturados en España y seis en Portugal. Esta información fue proporcionada por la Policía Nacional a través de un comunicado de prensa, donde se detalló la investigación llevada a cabo en ciudades como Madrid, Barcelona, Bilbao, Cuenca y Plasencia, ubicada en la provincia de Cáceres.


Para 16 de los detenidos, se ha decidido el ingreso en prisión provisional sin posibilidad de fianza.

De acuerdo con la Policía, la organización era "altamente especializada en la introducción de alijos de cocaína en Europa". Para sus operaciones, se valía de aviones privados fletados, y sus integrantes poseían una amplia red de contactos para facilitar tanto el envío como la recepción de los cargamentos de cocaína.

Para obtener financiación, el entramado criminal se dirigió a empresarios de origen chino, conocidos como 'hawalers'. Estos empresarios poseían la capacidad económica necesaria y una estructura que operaba a nivel mundial, lo que les permitía llevar a cabo compensaciones de créditos al margen del sistema financiero legal.

La investigación ha llevado a la intervención de 460 kilos de cocaína, un arma corta, más de 500.000 euros en efectivo, 18 vehículos y 45 terminales móviles, siendo la mayoría de estos últimos encriptados. Además, se han bloqueado 8 inmuebles que tienen un valor superior a 1.650.000 euros, así como 80 cuentas bancarias con un saldo total de 660.000 euros.

Un colombiano y una cafetería en La Moraleja

En el corazón de La Moraleja, se encuentra una acogedora cafetería que ha ganado popularidad entre los residentes. Este lugar, regentado por un talentoso colombiano, ofrece una experiencia única a sus visitantes.

Aquí, el aroma del café recién hecho se mezcla con la calidez del ambiente, creando un espacio perfecto para relajarse o trabajar. Los clientes destacan la amabilidad del personal y la calidad de los productos.

"El mejor café que he probado en años", comenta un habitual visitante.

Además, la decoración refleja la cultura colombiana, haciendo sentir a todos como si estuvieran en casa. Sin duda, esta cafetería se ha convertido en un punto de encuentro para quienes buscan disfrutar de un buen café en La Moraleja.

"Siempre regreso por el ambiente y el sabor auténtico", dice otro cliente satisfecho.

Así, este rincón colombiano sigue atrayendo a más personas, consolidándose como un lugar imprescindible en la zona.

Las indagaciones iniciales, que comenzaron en junio de 2023, fueron llevadas a cabo de manera conjunta por la Policía Nacional y la DEA estadounidense. Estas investigaciones se enfocaron en las actividades de un ciudadano colombiano que reside en Madrid, quien, según se presume, encabezaba una significativa organización criminal dedicada a la importación de grandes volúmenes de cocaína.

Durante la etapa inicial, el enfoque de la investigación estuvo en una cafetería ubicada en La Moraleja (Madrid). Este lugar, al que los participantes del estudio se referían como "la oficina", era donde se realizaban la mayoría de las reuniones de los integrantes de la organización.

Después de varios meses de investigación, los agentes lograron verificar que la organización poseía acceso a múltiples aeropuertos europeos, los cuales utilizaban como puntos de entrada para sus cargamentos de cocaína. Uno de estos aeropuertos se localizaba en la ciudad portuguesa de Beja. En esta localidad, el entramado contaba con una extensa estructura, lo que explicaba por qué sus integrantes llevaban a cabo frecuentes desplazamientos hacia Portugal.

En el mes de enero, los agentes se enteraron de que la organización había iniciado su primer vuelo fletado desde Barranquilla (Colombia) hacia el Aeropuerto de Beja (Portugal). A bordo del avión viajaban varios miembros de la organización, así como pilotos contratados para dicha operación.

No obstante, a pesar del extenso operativo que se había implementado, las acciones de la policía lograron verificar que el avión en cuestión no había conseguido ser abastecido con cocaína en Barranquilla. Esto resultó en pérdidas económicas para la organización, las cuales superaron los 500.000 euros.

Por lo tanto, optaron por realizar operaciones de menor escala que no exigieran una gran inversión económica. Así, iniciaron el envío de maletas con cocaína desde varios países hacia el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.

Los agentes lograron detectar los envíos, interceptando un total de cuatro en diferentes fechas. En septiembre de 2023, se confiscó un cargamento que contenía 16,5 kilos de cocaína; en marzo de 2024, fueron 31 kilos de cocaína; en abril de 2024, la cantidad ascendió a 60 kilos de cocaína; y finalmente, en septiembre de 2024, se encontraron 20 kilos de estupefaciente.

En el mes de mayo anterior, un contenedor de aguacates fue enviado por la organización desde Perú hacia el Puerto de Barcelona. Este contenedor, sin embargo, escondía en su base un total de 344 kilos de cocaína, aunque los agentes lograron interceptarlo antes de que llegara a los integrantes del entramado.

En junio de 2024, se llevó a cabo un segundo intento por parte de los investigados para el transporte de la droga utilizando un avión privado. Después de obtener financiación mediante diversos inversores externos provenientes de México, se fletó una aeronave privada que partió desde Johannesburgo (Sudáfrica) con destino a la República Dominicana. Allí, estaba previsto que se cargara el estupefaciente antes de continuar hacia el Reino Unido. Sin embargo, al igual que en el primer intento, surgieron problemas logísticos que impidieron la carga de la cocaína.