Iberdrola ha anunciado que ha obtenido el permiso ambiental necesario para llevar a cabo su primera repotenciación en España. Este proyecto se realizará a través del parque eólico Molar del Molinar, ubicado en Albacete.
Asimismo, la empresa energética avanza en los procedimientos para mejorar la capacidad de otro parque eólico terrestre en esta comunidad autónoma, el de Isabela. Esta acción permitirá disminuir en 117 la cantidad de aerogeneradores que se encuentran instalados en la región y aumentar la producción de energía de las instalaciones en un 30%.
En particular, las máquinas que se emplearán en la repotenciación tendrán una potencia unitaria que puede ser hasta seis veces superior a la de los primeros aerogeneradores que se instalaron en España hace más de veinte años.
Así, los dos parques eólicos terrestres de la región verán su número de aerogeneradores reducirse de 139 a solo 22.
Inaugurado en 2001, el parque Molar de Molinar, con una capacidad de 49,5 megavatios (MW), proporciona energía limpia a 29.500 hogares. Este parque contará con 11 aerogeneradores Vestas de 4,5 MW, lo que representa una reducción significativa en comparación con los 75 actuales, que tienen una potencia de 660 kilovatios (kW).
El parque eólico Isabela, con una capacidad de 48 MW, experimentará una transformación significativa, reduciendo su número de aerogeneradores de 64 unidades de 750 kW a solo 11 aerogeneradores de la marca Vestas: seis con una potencia de 4,5 MW y cinco más de 4,2 MW. Este proyecto permitirá que un total de 26.000 familias accedan a energía libre de emisiones gracias a las mejoras implementadas en el parque.
Se anticipa que los proyectos tendrán un efecto significativo en la economía nacional, tanto por el desmantelamiento relacionado con la contratación de la empresa coruñesa Invenergy Huso para el parque Molar del Molinar, como por la fase de construcción. En este contexto, se cuentan con empresas como el grupo Marco de Huesca y Vázquez y Reino de A Coruña, que actúan como 'epecistas', así como la empresa salmantina Tecinsa, encargada de construir ambas subestaciones.
Incrementar la eficiencia y optimizar la producción son objetivos fundamentales en cualquier proceso industrial.
De igual manera, la economía local se verá beneficiada durante el desarrollo de la obra, ya que se empleará a empresas y trabajadores de la región. Un ejemplo de ello es la colaboración con Sidys, una empresa de Albacete, que participará en el desmantelamiento del PE Isabela. Además, las palas de los aerogeneradores serán producidas en Daimiel, ubicado en Ciudad Real.
Esta iniciativa se sitúa dentro de la primera convocatoria de ayudas del programa de Repotenciación Circular, que ha sido concedida por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico mediante el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE). En conjunto, la cantidad total de ayuda destinada a estas dos instalaciones alcanzó los 22,71 millones de euros.
La repotenciación es un proceso que tiene como objetivo maximizar la producción de energía y incrementar la eficiencia de los parques eólicos. Este procedimiento implica el reemplazo de las turbinas antiguas por modelos más avanzados y potentes. Como resultado, estas nuevas turbinas generarán una mayor cantidad de energía en comparación con las anteriores, lo que significa que se requerirán menos unidades para alcanzar la misma capacidad de producción.
Asimismo, se producirá un impacto paisajístico reducido, lo que favorecerá de forma notable la eficiencia y la sostenibilidad en la generación de energía.