El concejal de Sostenibilidad, Julián Ramón, recuerda a los hogares que participan en esta recogida selectiva que los contenedores sólo pueden abrirse mediante una tarjeta que se entrega a domicilio o bien se recoge en el Aula de la Naturaleza
La recogida de residuos orgánicos separada a través del contenedor marrón dará comienzo hoy en los barrios incluidos dentro de la segunda fase de extensión de este nuevo contenedor, en concreto, en los barrios de Pedro Lamata, Sepulcro-Bolera, Cañicas-Imaginalia y parte de San Antonio Abad y Universidad.
Cabe recordar, que este contenedor marrón comenzó a implantarse en el verano de 2020 mediante una experiencia piloto y que antes de que finalice este año estará en toda la ciudad.
El concejal de Sostenibilidad, Julián Ramón, ha dado de antemano las gracias a los más de mil hogares que se han sumado ya a esta nueva recogida selectiva, retirando la tarjeta que les permitirá abrir los contenedores marrones, donde se deposita la basura orgánica, pues ha recordado que estos contenedores permanecen cerrados, -para evitar malos olores-, y solo deben usarse dentro del horario establecido, mediante el sistema de apertura con tarjeta.
El contenedor podrá abrirse desde las 8 de la tarde (20.00 horas) hasta las 3 de la madrugada. Fuera de su horario no se podrá abrir y no deben dejarse bolsas fuera del contenedor. Se aconseja usar bolsas biodegradables para favorecer el proceso de compostaje de la materia orgánica.
Julián Ramón ha detallado que en esta fase de implantación de la recogida de basura orgánica se han instalado un total de 47 contenedores y se han repartido 1.111 tarjetas en hogares, una distribución puerta a puerta que realizan los operarios de la concesionaria de recogida de residuos, que continuará en los próximos días. Quien desee retirar la tarjeta puede hacerlo en el Aula de la Naturaleza de Parque Abelardo Sánchez, de 9.30 a 13.30 horas, de lunes a viernes, y los jueves en horario de tarde (17.30 a 19.30 horas).
Con esta basura orgánica, se obtiene un compost de alta calidad para usarlo como abono en agricultura y jardinería y además se mejora la calidad y los procesos de reciclaje de otros materiales de los residuos. En el contenedor marrón deben depositarse restos de fruta y verdura; restos de carne y pescado; restos de pan, bollería y otros alimentos; cáscaras de huevo, marisco y frutos secos; posos de café y restos de infusiones; papel de cocina, servilletas y pañuelos de papel sucios; pequeños restos vegetales, tales como flores, plantas, césped y hojas; tapones de corcho; cerillas, serrín, palillos y virutas de madera y excrementos de mascotas sin arenas o lechos absorbentes.
Distribución de contenedores
En el barrio de San Antonio Abad se ha instalado contenedores en las calles Casas Ibáñez; Talabarteros; III Centenario; Arquitecto Josef Ximénez; Nuestra Señora de Cubas y Cronista Mateo y Sotos. El contenedor marrón se extenderá más adelante al resto del barrio.
En el barrio de Cañicas-Imaginalia los contenedores marrones se han ubicado en las calles Saturnino Callejas; Municipio de Molinicos; Oscar Wilde; María de Zayas; Avenida Emilia Parto Bazán; Avenida de la Mancha; Encuadernadores; Lezuza; Hilanderas y carretera de Madrid.
En Pedro Lamata, los contenedores marrones se sitúan en las calles Pedro Ortiz; Méndez Parada; Teniente Rueda y Doctor Galiacho; mientras que en el barrio Sepulcro Bolera los contenedores se localizan en la calle Arboleda; Clavileño; Arado; Aldonza; San Juan; Sancho Panza e Imperial.
Por último, se completa en esta fase la recogida orgánica en el barrio Universidad, instalando contenedores en la calle Olimpia y Maratón y en la Avenida de la Mancha.
En este barrio, el de Universidad, se colocaron contenedores marrones en el verano de 2020, junto a los barrios de Medicina y Hospital, dentro de una experiencia piloto que se puso en marcha y que ha permitido incorporar mejoras en el sistema, como por ejemplo el cambio de cerraduras de los contenedores. Desde que se puso en marcha la experiencia en el área piloto se han registrado ya más de 100.000 aperturas de contenedor y se han podido recoger 237.120 kilos de basura orgánica, de una gran pureza, superior al 97%, porcentaje que evidencia la buena separación de residuos que hacen los hogares que participan.