Saúl no es un hombre al que le guste demasiado la fama, pero al fin hemos podido ver la mansión Canelo, la cual ha enseñado con un fin específico.
A diferencia de otros boxeadores, los cuales lo han tenido más fácil por contar con recursos o por tener un padre famoso en esta disciplina, Saúl tuvo que empezar desde lo más bajo.
Es por eso por lo que se ha decidido a enseñarnos su mansión de México, con la cual quiere mostrar a todo el mundo que se puede llegar muy lejos si se trabaja duro y se tiene motivación, todo ello pese a comenzar sin nada pues el boxeador se dedicaba a vender productos a los camioneros.
Viendo su garaje, que en realidad es una planta de su mansión, está muy claro que a Saúl le encantan los coches de lujo. Tiene muchos, algunos de marcas tan icónicas como Ferrari. De la marca italiana nos enseña un Testarossa, un modelo de los 80 que y principios de los 90 que Canelo veía en las series de la tele.
No faltan coches como los Mustang o un Rolls-Royce espectacular que Saúl asegura no haber conducido nunca, pues siempre usa un chófer con ese vehículo para ir a las entrevistas o a cenar.
Por supuesto, los coches eléctricos también tienen cabida en su garaje, con un Tesla Model X que puede “bailar” gracias a un modo especial que se activa desde su enorme tablet.
A Saúl le gustan mucho los coches lujosos, pero no se olvida que los puede comprar gracias al boxeo y por eso comparten espacio con los vehículos. De hecho, tiene las paredes forradas con los cinturones que ha ganado e incluso fotos de los estadios en los que se han celebrado los combates más importantes de su carrera.
Cuando uno entra a la casa de un boxeador espera ver coches de lujo, algunas motos de las más rápidas del mundo o una colección de zapatillas (todo esto lo tiene Saúl), pero lo que no parece encajar dentro del contexto es el arte contemporáneo.
Canelo Álvarez tiene una buena cantidad de obras de arte de México, pues dice que le gusta colaborar a la hora de fomentar el arte de su país, dando publicidad a los artistas siempre que le es posible.
De entre todas las obras que atesora el púgil destacan las de Sergio Bustamante, un artista contemporáneo muy conocido en México y que gracias a Saúl va a ser reconocido en el resto del mundo, pues que sus obras estén en la mansión del boxeador significa que van a tener una mayor repercusión.
Saúl vive muy bien gracias a que es uno de los mejores boxeadores del mundo, en una mansión en la que los coches de lujo comparten espacio con las personas, con las motos o con obras de uno de los mejores artistas mexicanos.