García-reclama una “medida homologable” entre el Gobierno nacional y las Comunidades Autónomas para abordar el avance de la COVID-19
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha confirmado este martes que el Gobierno no aprobará una prórroga del estado de alarma en la Comunidad de Madrid, que decaerá el próximo sábado. Además, estudiará con todas las comunidades autónomas la fórmula del toque de queda para evitar la propagación del coronavirus, aunque ha avisado de que esta medida requeriría la declaración de estado de alarma en los territorios afectados.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Illa ha apuntado que la cifra de contagios en la Comunidad de Madrid ha descendido después de 21 días de medidas "muy estrictas" y, aunque los datos aún son "altos" y no "tranquilizadores", el Ejecutivo no prorrogará el estado de alarma y estudiará junto al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso las medidas a adoptar.
En cuanto a la posibilidad de decretar un toque de queda, ha aceptado que es una medida que se está aplicando en otros países europeos y ha dicho que se estudiará con todas las comunidades autónomas. Eso sí, ha subrayado que requeriría del estado de alarma y por tanto debería ser aprobado con "la certeza" de que cuenta con suficiente apoyo de los grupos parlamentarios para salir adelante en el Congreso de los Diputados si tuviese que aplicarse durante más de 15 días.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha instado este martes al Partido Popular a dejar claro si estaría dispuesto a apoyar en el Congreso de los Diputados la declaración del estado de alarma para establecer un toque de queda para contener la propagación del coronavirus.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Illa ha aceptado que el toque de queda es una de las medidas que podría adoptarse para frenar el Covid-19, igual que ya están haciendo otros países europeos, y así lo analizará el Gobierno con todas las comunidades autónomas.
Sin embargo, ha subrayado que solo podría llevarse a cabo mediante la declaración del estado de alarma y por ello ha urgido al PP a aclarar si estaría dispuesto a apoyarlo en el Congreso. "Si vamos por aquí necesitamos el estado de alarma y quiero saber quién está dispuesto a apoyarlo", ha explicado sobre la posibilidad de que tuviese que prolongarse durante más de 15 días y por tanto requiere del voto a favor del Parlamento.
Page pide medidas iguales para todos
García-reclama una “medida homologable” entre el Gobierno nacional y las Comunidades Autónomas para abordar el avance de la COVID-19
Tras garantizar su “colaboración y respeto absoluto a la dirección nacional que tiene que tener la pandemia”, el presidente castellano-manchego ha reiterado que a las autonomías “nos corresponde gestionar la Sanidad, pero las decisiones de planificación estratégica que sobrepasan a cualquier comunidad autónoma le corresponden al Estado”.
Toledo, 20 de octubre de 2020.- El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha reclamado hoy la necesidad de adoptar una “medida homologable clara” entre el Gobierno de la Nación y el conjunto de las Comunidades Autónomas que dé una “respuesta nacional homogénea ante el crecimiento disperso y preocupante del virus en el conjunto de España”. En definitiva, ha subrayado, se trata de adoptar una solución común “con un mensaje nacional que haga que las decisiones tengan eficacia porque se aplican al conjunto y no por trozos”.
De esta manera se ha pronunciado García-Page durante la presentación, este martes en el Palacio de Fuensalida, sede de la Presidencia regional, del Plan de Traslado del Hospital Universitario de Toledo, diseñado para garantizar la calidad asistencial en la prestación de servicios a los usuarios del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) durante el período en el que se prolongue este proceso.
Según el jefe del Ejecutivo castellano-manchego, urge “hacer una reflexión colectiva que se impone en estos días con el Gobierno de España, porque empiezan a ser multitud de decisiones las que se están tomando y vamos a terminar mareados”. Una medida, ha argumentado, “que no nos haga pensar al conjunto del país que unos están peor a costa de otros porque están mejor, o al revés, y que nos permita una reacción nacional”.
En este sentido, y tras garantizar su “colaboración y respeto absoluto a la dirección nacional que tiene que tener la pandemia”, ha reiterado que a las autonomías “nos corresponde gestionar la Sanidad, pero las decisiones de planificación estratégica que sobrepasan a cualquier comunidad autónoma le corresponden al Estado”.
Asimismo, ha insistido en la necesidad de mantener “un grado no solo de lealtad, sino de inteligencia, para que lo que se haga responda no a la voluntad política, sino a la determinación técnica y científica sobre la que empieza a haber bastante claridad”, y ha determinado que son “bastantes” las autonomías que plantean alcanzar esta medida, y que el Ministerio de Sanidad “está más que asequible” a adoptar esta decisión.