Por norma general, la elección de un dentista o de una clínica dental se realiza con mucho cuidado porque, salvo sorpresas desagradable, se tratará de una relación profesional-paciente que durará años.
Cada cliente y cada boca tiene unas necesidades específicas, que pueden cambiar a lo largo de la vida. En este sentido, las clínicas dentales que cuentan con varios profesionales especializados en campos diferentes suelen ser más versátiles. Aunque, por ejemplo, a un adulto sin hijos y con los dientes bien alineados le es indiferente que su odontólogo no preste servicios de ortodoncia o que no acepte a niños como pacientes.
Existen casos de clínicas dentales especializadas en temas concretos, en general los implantes dentales, que no se ocupan de otros cuidados de la boca. Son los casos menos frecuentes y suelen recurrir a precios muy bajos como reclamo publicitario.
Al margen de lo que el cliente necesite a corto plazo, a un buen dentista se le reconoce por el trato cálido y amable, por la preocupación por conservar las piezas dentales que se puedan salvar mientras sea posible, y por preguntar a un nuevo paciente sobre su estado general de salud, alergias, toma de medicamentos, etc.
Un odontólogo no sólo se preocupa de las piezas dentales y de las encías, sino que debe velar por la salud de toda la cavidad bucal. Para ciertas enfermedades ya se requiere no un dentista sino un estomatólogo.
En las poblaciones medianas hay muchos especialistas. Por ejemplo, si buscamos clínica dental Salamanca, podremos asegurarnos encontrar alguna con una plantilla amplia y con experiencia. Los testimonios de los pacientes suelen ser un buen indicador de la fiabilidad de una clínica dental en Salamanca, sin desmerecer a ningún dentista Salamanca que trabaje solo con un auxiliar, pues también hay excelente profesionales que deciden no asociarse con otros por el motivo que sea. Cada uno es libre de llevar a cabo su negocio como considere más oportuno y, hasta hace unos años,el concepto de clínica dental era poco habitual. Muchos dentistas Salamanca tienen su clientela fiel y su prestigio conseguido durante años y no quieren arriesgarlo con socios a quienes es posible que no conozcan. O trabajan con un familiar o alguien de total confianza, pero no desean empezar casi de nuevo.
El número de profesionales que componen un equipo en una clínica dental o el hecho de tratarse de un único odontólogo no son indicativos de un mejor o peor servicio ni de una atención al paciente más cuidada o menos, como tampoco suele serlo el precio medio.
Es por ello que los testimonios de conocidos siguen siendo la primera opción para acotar la lista inicial de posibles candidatos.
Se debe valorar que, para ciertos tratamientos como la cirugía maxilofacial, puede compensar elegir un centro especializado que no se encuentre al lado de donde vivimos o trabajamos. En el cuidado de la salud de la boca no todos los sitios pueden ofrecer todos los servicios o no disponen de mucha experiencia con determinadas especialidades, y el paciente es el primero que debe velar por elegir al mejor o los mejores profesionales del sector dentro de un radio de distancia razonable.