De enero a julio, 4.836 donantes han realizado su donación por primera vez este año y han pasado a formar parte de la gran familia de donantes de sangre de Castilla-La Mancha.
Gracias a la solidaridad, altruismo, fidelidad y disponibilidad de nuestros donantes de sangre, Castilla-La Mancha es autosuficiente en componentes sanguíneos.
Los tres Centros Regionales de Transfusión de Castilla-La Mancha han atendido en los siete primeros meses de este año un total de 48.405 donantes, obteniendo 42.840 donaciones de sangre.
De ellas, 13.943 se realizaron en los puntos fijos ubicados en los hospitales de la Comunidad Autónoma y 28.898 en las distintas colectas extrahospitalarias que se llevan a cabo en los pueblos de la región.
Además, en este periodo se han realizado 1.306 plasmaféresis (donación exclusiva de plasma) y 381 plaquetoféresis (donación exclusiva de plaquetas) por métodos de aféresis.
De una donación de sangre se obtienen concentrados de hematíes, plasma y con cinco donaciones se consigue un pool de plaquetas, es decir, una mezcla de plaquetas correspondientes a varias donaciones para conseguir la dosis suficiente que garantice su eficacia en el tratamiento de hemorragias.
Por otra parte, en estos siete primeros meses del año, 4.836 donantes han sido nuevos, es decir, han realizado su donación por primera vez este año y han pasado a formar parte de la gran familia de donantes de sangre de Castilla-La Mancha.
Desde la Red de Hemodonación, Hemoterapia y Hemovigilancia de Castilla-La Mancha, su coordinadora, la doctora Elena Madrigal, agradece a todos los donantes de sangre de Castilla-La Mancha su solidaridad y fidelidad porque continúan donando sangre con regularidad, de forma que no solo aseguran la actividad diaria de los hospitales, sino que permite que de forma periódica sus donaciones sean sometidas a un análisis garantizando la seguridad transfusional de estos productos para los pacientes.
“Todos los profesionales de los Centros de Transfusión de Castilla-La Mancha agradecemos la gran labor que realizan diariamente los donantes de sangre de la región que dan vida a los demás de forma anónima sin esperar nada a cambio”, ha señalado la doctora Madrigal, que ha recalcado también la respuesta inminente que ofrecen los donantes siempre que se realiza un llamamiento general ante la necesidad de algún grupo sanguíneo concreto.
Donar durante todo el año
La coordinadora de la Red de Hemodonación ha apuntado que los meses de verano son muy importantes para los Centros de Transfusión porque tienen que garantizar las reservas de componentes sanguíneos para los hospitales, ya que a su actividad asistencial habitual, se une el hecho de que el incremento de los desplazamientos de los ciudadanos por vacaciones, celebraciones de fiestas, etc, multiplica los riesgos de accidentes de tráfico.
La doctora Madrigal ha recordado que la Federación Nacional de Donantes de Sangre ha puesto en marcha este verano la campaña “Olimpiada Roja 2017”, para poner en valor que las donaciones de sangre son necesarias durante todo el año y de ahí que animen a la sociedad a realizar su donación antes de marcharse de vacaciones o hacerlo allí donde se desplacen.
En Castilla-La Mancha durante los meses de verano los puntos fijos de extracción de los distintos hospitales siguen atendiendo a los pacientes. Además, se mantienen las colectas diarias extrahospitalarias en diferentes localidades de la región, donde los profesionales sanitarios de los Centros de Transfusión, acompañados de las Hermandades de Donantes de Castilla-La Mancha y de sus Juntas Locales, cuidan todos los detalles para realizar las donaciones.
Según la doctora Madrigal, actualmente los stocks de los hospitales tienen cubiertas sus necesidades de todos los componentes sanguíneos con sus diferentes grupos aunque ha insistido en la necesidad de seguir trabajando en esa dirección “con mucha ilusión, calidad y generosidad para garantizar en todo momento la salud de los castellano-manchegos”.
“Debemos continuar donando sangre, porque la sangre siempre debe esperar al enfermo y tiene que estar preparada, analizada y óptima para que en cualquier circunstancia se pueda utilizar y, sobretodo, garantizar que todas las intervenciones quirúrgicas programadas se realicen con sus reservas de sangre recomendadas”, ha añadido.
Red de Hemodonación
La Red de Hemodonación, Hemoterapia y Hemovigilancia de Castilla-La Mancha se compone de tres Centros de Transfusión, de los Servicios de Transfusión de los 14 hospitales de la región y de los puntos de extracción fijos de donación de sangre ubicados en los centros hospitalarios.
El Centro de Transfusión de Albacete y Cuenca está ubicado en el Complejo Hospitalario Universitario de Albacete y abastece componentes sanguíneos a los hospitales de Albacete, Cuenca, Almansa, Villarrobledo y Hellín; el de Ciudad Real, ubicado en el Hospital General Universitario de Ciudad Real, se encarga del abastecimiento a este hospital y a los de Alcázar de San Juan, Puertollano, Manzanares, Valdepeñas y Tomelloso; y el de Toledo y Guadalajara, se encuentra en el Complejo Hospitalario de Toledo y abastece a éste y a los hospitales de Guadalajara y Talavera de la Reina.
Los Centros de Transfusión y los Servicios de Transfusión disponen de grandes profesionales sanitarios cualificados de todas las categorías: médicos, hematólogos, enfermeros, técnicos superiores de laboratorio, auxiliares, celadores todos ellos con amplia experiencia en la donación de sangre, transfusión de componentes sanguíneos y hemovigilancia para conseguir la excelencia en la atención al donante de sangre y garantizando la seguridad transfusional para los pacientes de Castilla-La Mancha.
Finalmente, la doctora Madrigal ha trasladado su agradecimiento a las Hermandades de Donantes de Sangre de Castilla-La Mancha, que colaboran con los Centros de Transfusión para desarrollar la promoción de la donación y proporcionan personal auxiliar administrativo a los Centros de Transfusión, conductores, unidades móviles para el desplazamiento a las distintas localidades para la colecta extrahospitalaria, carteles informativos, cartas de convocatoria, carnet de donantes, bebidas y bocadillos para los donantes para su recuperación tras la donación de sangre y algún detalle-regalo también para el donante.