Nuestros mayores también celebran el carnaval y lo que les pongan por delante, dando fiel ejemplo de espíritu vital. Se celebró el jueves
lardero con ‘mona’ y baile y el miércoles de ceniza se quemó la sardina, elaborada por ellos mismos , con lo cual también sirvió de terapia ocupacional, aunque el dolor de quemarla fuese mayor .
La quema fue acompañada de una ‘sardinada’ con pimientos, en los jardines de la residencia, donde las desconsoladas viudas y el cortejo fúnebre dieron buena cuenta de las viandas preparadas por las cocineras de la residencia.