La Guardia Civil de Ciudad Real ha detenido a 21 personas en una operación en la que ha intervenido más de 98 kilos de
hachís, 180 gramos de cocaína, 200 gramos de marihuana, 1.050 gramos de sustancias de corte y 800 pastillas de anabolizantes.
El subdelegdo del Gobierno en Ciudad Real, Fernando Rodrigo, y el jefe de la Comandancia de la Guardia Civil, Humberto Urruchi, han explicado hoy en rueda de prensa los detalles de esta operación en la que también se han intervenido diversos utensilios para manipular, adulterar y cortar la droga, 18.000 euros en metálico y siete vehículos.
Fernando Rodrigo ha felicitado a la Guardia Civil por esta actuación en la que han desmantelado ocho puntos de venta de drogas en la provincia de Ciudad Real y dos en Madrid.
La operación se ha divido en varias actuaciones, la primera llevada a cabo por la Guardia Civil de Valdepeñas (Ciudad Real) que se inició en octubre del pasado año tras conocerse que vecinos de las localidades de Torrenueva y Membrilla estaban adquiriendo cocaína en Valdepeñas.
Las primeras gestiones consistieron en identificar y localizar a estas personas, lo que llevó a los investigadores a localizar domicilios y establecimientos que vendían droga.
"En un tiempo récord", ha explicado el subdelegado, "se fueron identificando a todas las personas que iban a comprar sustancias estupefacientes, descubriendo, a la vez ,que estas se suministraban también de otros más, identificados escalonadamente en el transcurso de la investigación".
Algunas personas identificadas y relacionadas con la activad ilícita de tráfico de drogas tenían ya antecedentes policiales por hechos similares.
Después de varios meses de "intensa" actividad investigadora, se conoció que la droga llegaba a través de dos personas de nacionalidad dominicana, con las que tenían contactos personales todas las semanas.
La organización criminal estaba formada por varios grupos, el principal de ellos ubicado en Madrid, y los jefes eran dos hombres dominicanos cuyo nexo con la provincia de Ciudad Real era que uno había residido en Valdepeñas, donde aún mantenía una vivienda que ocupaba esporádicamente.
Posteriormente, los agentes localizaron los pisos donde guardaban la droga en Madrid y comprobaron que también suministraban cocaína a prostitutas de los clubes de alterne próximos a Valdepeñas, a veces haciéndosela llegar personalmente y en otras ocasiones utilizando a un taxista, vecino de esta población y miembro de la organización.
El pasado 23 de febrero se desplegó un amplio y complejo dispositivo policial en el que participaron ochenta agentes de la Guardia Civil que hicieron posible las 21 detenciones.