El Plan de Empleo que va a poner en marcha el Gobierno de Castilla-La Mancha movilizará 345 millones
de euros en dos años, 224 millones de dinero público y el resto privado, para que 60.000 parados se incorporen al mercado laboral dentro de una estrategia "realista", con financiación y pactada con los agentes.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha presentado hoy este Plan Extraordinario de Empleo, que se desarrollará en decretos que se publicarán a lo largo de septiembre, acompañado por el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, y la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco.
El Plan contará con 224 millones de euros de dinero público -más del 80 por ciento lo pondrá la Junta-, aunque prevé movilizar hasta 345 millones incluyendo capital privado.
En un receso del Consejo de Gobierno que ha aprobado el Plan, García-Page ha asegurado que se trata del proyecto de promoción de empleo "más ambicioso" de la historia autonómica de Castilla-La Mancha, puesto en marcha en apenas dos meses y pactado con los interlocutores sociales.
Va dirigido, sobre todo, a los menores de 30 años y a los mayores de 55 años, aunque no habrá ningún colectivo excluido, y se centrará en cinco grandes ejes: tres ligados al paro juvenil y dos al de larga duración.
A los jóvenes se les ofertará un programa de adquisición de competencias básicas, si no tienen Secundaria; un programa de formación y aprendizaje, si tienen Secundaria pero no cualificación profesional; o un contrato puente, para que quienes finalizan sus estudios tengan un empleo ajustado a su titulación.
La Junta establecerá ayudas para empresas y centros de formación homologados, para impulsar los contratos de formación y aprendizaje durante un año, y en el caso del contrato puente tendrán una duración de al menos un año y la subvención equivaldrá a la mitad del salario mínimo interprofesional.
En cuanto a los desempleados de larga duración, habrá un plan de rescate para quienes han agotado su prestación, y un plan de garantía para mayores de 55 años (hay 29.500 fuera del circuito laboral) de modo que puedan realizar proyectos en su comunidad durante dos años prorrogables.
En este caso, serán los municipios los que podrán acceder a una subvención equivalente a la mitad del salario mínimo interprofesional.
El Plan de Empleo, asimismo, favorecerá a los municipios con un desempleo superior a la media regional, tiene una línea exclusiva para empresarios y autónomos empleadores e incluirá a colectivos concretos, como pueden ser personas con discapacidad y mujeres víctimas de violencia machista.
El consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha explicado que este Plan Extraordinario de Empleo estará "completamente dotado" en los presupuestos de los próximos años y será compatible con el cumplimiento de los objetivos de estabilidad presupuestaria.
Según los datos que ha ofrecido la consejera, en Castilla-La Mancha se han perdido 66.700 empleos en cuatro años y, en concreto, hay 41.000 menores de 25 años que no están incorporados al mercado laboral, de los cuales 11.000 no tienen los estudios de Secundaria.
Algunas medidas del Plan podrán ponerse en marcha en el último trimestre de este año y otras a principios de 2016, según García-Page quien ha subrayado que no quedará "en una quimera" sino que estará reflejado en decretos que se publicarán en el Diario Oficial de la región.
El presidente autonómico ha pedido la implicación de toda la sociedad en esta "prioridad" de crear empleo, y al Partido Popular, en concreto, le ha pedido que no ponga "palos en la rueda" y se sume: "que me critiquen a mí, pero que apoyen el Plan. Que nos dejen intentarlo", ha dicho.
En este sentido, la consejera de Economía ha dicho que se ha reunido con "prácticamente todas" las diputaciones provinciales y no ha encontrado "ninguna mala predisposición inicial" a no apoyar este Plan.
"No se cuestiona la incorporación, hoy por hoy, de ninguna Diputación al Plan que presentamos", ha indicado Franco, quien además ha dicho que a estas corporaciones provinciales les interesa sumarse a un proyecto que supone creación de empleo en sus respectivos territorios.
García-Page también ha resaltado que su "principal compromiso" como presidente regional es el empleo y ha agregado que asume su "responsabilidad" en el proceso de recuperación económica de una comunidad autónoma que ha agrandado su "brecha" social económica respecto a la media nacional en los últimos años, ha dicho.