En una información que recoge la Agencia EFE, José García Molina, el secretario general de
Podemos, ha realizado unas declaraciones que están entre la soberbia y la maldad, o en simplemente engañar a sus votantes para que siga Cospedal. Igual es sólo lo que dicen los políticos cuando quieren poder porque si detrás de sus palabras hay una mínima posibilidad real de que no haya pacto de izquierdas parece claro que Podemos será fuerza de una sola legislatura porque ni uno de sus votantes entendería que siguiera Cospedal con una mayoría de izquierdas en la región.
Vamos con lo que ha dicho el secretario general de Podemos Castilla-La Mancha, y es que José García Molina, ha afirmado hoy que no hay pactos con el PSOE, ha mostrado su extrañeza con que el candidato socialista, Emiliano García-Page, se presentara como ganador de las elecciones y ha comentado "quizás han hecho mal las cuentas".
En una rueda de prensa celebrada esta tarde tras la reunión del Consejo de Coordinación del Consejo Ciudadano de Podemos, García Molina ha dicho que vio con una "cierta extrañeza" que Page se presentara ayer como ganador de las elecciones autonómicas.
"A uno le queda una sensación un poco rara, porque o bien no sabe contar, o es que tiene un pacto con el PP, porque desde luego con nosotros no lo tiene, ni nos ha llamado, ni hemos hablado, ni nada que se le parezca" ha aseverado García Molina, que ha añadido: "entonces no acabamos de entender la euforia de hemos ganado las elecciones y lo de próximo presidente de la Junta".
"O han hecho mal las cuentas o es que saben algo que nosotros no sabemos y ese algo quizás sea que han hablado con el Partido Popular y quizás tengan algún acuerdo extraño que se nos escapa", ha ironizado García Molina sobre el hecho de que el PSOE obtuvo 14 diputados, el PP 17 y Podemos 3 en los comicios autonómicos.
El líder de Podemos y diputado electo ha insistido: "No hemos hablado ni con el Partido Socialista ni con el Partido Popular, no hemos hablado todavía con nadie, supongo que nos tocará hacerlo, pero hasta ahora o ha habido ningún tipo de llamada ni de contacto, ni de toma de contacto".
En este sentido, y a preguntas de los periodistas, ha calificado de "especulación" que se hubiera fraguado un hipotético pacto en la reunión que mantuvieron hace unos meses los socialistas José Bono y José Luis Rodríguez Zapatero con los líderes de Podemos Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, a la que también asistió García-Page.
Al respecto ha comentado: "Se ha estado especulando mucho, pero las especulaciones son libres".
Y ha reiterado: "No hablamos de pactos, no hemos hablado nunca de pactos, no somos un partido de pactos, tenemos un programa y queremos que ese programa se cumpla".
Ha recordado que Podemos tiene un plan de rescate ciudadano porque hay una situación de emergencia social en Castilla-La Mancha y ha recordado que hay tres puntos fundamentales de los que tendrá que hablar cualquier fuerza política que quiera dialogar con Podemos.
Éstos son hacer una auditoría ciudadana para conocer la deuda de la Junta de Comunidades, elaborar una ley avanzada de transparencia "de verdad" para la acción institucional de la Junta y un tercer elemento que es la "ley 25 de emergencia social".
Esta ley incluiría medidas como la paralización de los desahucios, un plan de garantía habitacional y un plan de suministros básicos.
En cualquier caso García Molina ha subrayado: "Podemos no ha venido para ser un partido testimonial, un partido bisagra o un partido menor, tenemos en el espíritu y en la cabeza construir una mayoría social que sirva para entender y hacer la política, en este caso en Castilla-La Mancha".
"Quién gobierne o quién no gobierne, es responsabilidad de los partidos que tiene la responsabilidad de gobernar", ha agregado.
El líder de Podemos ha advertido: "Nuestro adversario político no es ni Cospedal, ni Page ni Ángel Ligero, son las políticas de austeridad que se hacen contra la gente".
"La política no es una cuestión de siglas, nos importan poco las siglas", ha aseverado el líder de Podemos, quien se ha mostrado dispuesto a reunirse con la presidenta del PP castellanomanchego, María Dolores de Cospedal.
Le parecería altamente improbable que Cospedal quiera reunirse con él, pero ha asegurado que está dispuesto "a sentarse con quien sea a hablar de política".
Por otra parte, se ha mostrado partidario de reponer el sueldo a los diputados regionales para "dignificar la política", porque ha considerado que cualquier persona que haga un trabajo debería poder vivir de él y además ha criticado: "Se quita el sueldo a los diputados y se gastan millones en asesores".
A juicio de García Molina, es preciso "ingresar más y gastar mejor" ya que con el presupuesto que tiene la Junta "se pueden hacer infinitamente más cosas que las que se están haciendo".