Castilla-La Mancha destinará 7.125 millones de euros al estado de bienestar en 2025

El consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha destacado que el proyecto de Ley, el décimo aprobado por el Gobierno de García-Page, tiene como objetivo principal incentivar la actividad económica que produce riqueza y empleo. Además, busca fortalecer el Estado del Bienestar, proteger a las familias, fomentar la transición ecológica, acelerar la transformación digital, y seguir enfrentando el desafío de la despoblación.

El presupuesto total alcanzará los 12.716 millones de euros

El proyecto de Ley de Presupuestos Generales para 2025 ha sido aprobado por el Gobierno regional, alcanzando un total de 12.716 millones de euros. Esta cifra representa una variación del 1,9 por ciento en comparación con el año anterior. Este presupuesto integral está diseñado para fortalecer el desarrollo económico y social de Castilla-La Mancha, a través de la redistribución de la riqueza. Además, se mantiene como eje central de la gestión del Ejecutivo autonómico desde 2015 el lema: “crecer para compartir”.

El consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha compartido esta información durante la rueda de prensa que siguió al Consejo de Gobierno, celebrado este martes en el Palacio de Fuensalida, ubicado en Toledo. En esta ocasión, estuvo acompañado por el director general de Presupuestos, Isidro Hernández, quien también participó en la presentación del proyecto de Ley de Presupuestos para 2025.

Dicho proyecto ha sido registrado en las Cortes regionales para su correspondiente tramitación parlamentaria, con el objetivo de que entre en vigor el 1 de enero del próximo año.

De acuerdo con Ruiz Molina, el presupuesto se ha confeccionado “en un escenario económico regional muy positivo”. Esta situación se debe, en gran medida, a “la estabilidad política, a la certidumbre y al clima de normalidad existente en la Comunidad Autónoma, que la hace más atractiva para la inversión”.

Un entorno socioeconómico que permite observar, en lo que respecta al empleo, datos que evidencian una disminución de la tasa de desempleo desde 2015, reduciéndola a más de la mitad. Este crecimiento empresarial se manifiesta en las cifras de creación de empresas, superando las 21.000 en la última década.

Además, en este contexto, destacan las exportaciones, que reflejan un aumento del volumen de ventas al exterior del 63 por ciento desde 2015. Todo esto se resume en el Índice de Confianza Empresarial, el cual se posiciona como líder en la región y se encuentra 11 puntos por encima de la media nacional en España.

En esta oportunidad, el Presupuesto para 2025 se ve influenciado por dos elementos clave, según las declaraciones de Ruiz Molina. El primero de estos elementos es la notable disminución en los ingresos derivados del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR). Este aspecto ha sido destacado por el propio consejero, quien afirmó: “ya que es consecuencia del alto grado de ejecución que se ha tenido de estos fondos, que ha situado a la Comunidad Autónoma entre la segunda y tercera en ejecución”. El segundo elemento a considerar es que este presupuesto representa el décimo elaborado bajo el Gobierno de García-Page.

Un elemento que ha facilitado el examen del crecimiento de las diversas partidas, no solo en base a los años, sino desde 2015, es la necesidad de resaltar el esfuerzo realizado durante esta década. Este esfuerzo tiene como finalidad recuperar a la sociedad de los ajustes previos y ha resultado en un aumento de 4.500 millones de euros. De este modo, al concluir la ejecución de este presupuesto, habremos administrado un total de 110.000 millones en la última década, “que habremos devuelto a la ciudadanía en forma de infraestructuras, prestaciones y servicios públicos.”

Se priorizarán sanidad, educación y servicios sociales en la inversión

El consejero ha mencionado un hilo conductor que ha guiado la asignación de recursos. Este enfoque busca motivar la actividad económica, generando así riqueza y empleo. Con ello, el Gobierno aspira a fortalecer el Estado del Bienestar, al tiempo que protege a las familias y a los sectores más vulnerables. Además, se pretende impulsar la transición ecológica, acelerar la transformación digital y seguir enfrentando el desafío de la despoblación.

Respecto al gasto social, se asignarán 7.125 millones de euros, lo que representa un incremento de 2.625 millones en comparación con lo previsto en 2015. Esta inversión está destinada a financiar los servicios públicos que son fundamentales para el Estado del Bienestar, incluyendo la sanidad, la educación y los servicios sociales. En otras palabras, el 72 por ciento del gasto no financiero se utilizará para reforzar el sistema de bienestar y la protección social que se ha establecido en Castilla-La Mancha.

Así, se destina siete de cada diez euros a los servicios esenciales, con el objetivo de incrementar la cantidad de profesionales sanitarios y docentes; además, se busca invertir en infraestructuras y equipamiento, así como avanzar en la innovación y la digitalización.

Este enfoque permitirá la consolidación de la modernización del sistema de salud en la región, así como la mejora de la calidad y la excelencia educativa, y el fortalecimiento de la atención hacia los colectivos más vulnerables.

En este relevante conjunto de recursos, la partida destinada a sanidad se mantiene como la más elevada, alcanzando casi 3.800 millones de euros, tal como ha señalado el consejero. Este monto representa un incremento del 58 por ciento desde 2015 y permitirá incrementar el número de profesionales sanitarios. Se contempla la convocatoria de 5.200 plazas para 2025, lo que posiciona al sistema de salud regional como uno de los más atractivos.

Además, este presupuesto facilitará la continuidad del plan para las infraestructuras sanitarias proyectadas, así como el refuerzo de la atención primaria, especialmente en las zonas rurales. También se busca mejorar la capacidad resolutiva del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, apostando por las tecnologías más avanzadas.

Se destinarán 2.380 millones de euros al sector de Educación, Cultura y Deportes, lo que representa un aumento del cinco por ciento en comparación con el presupuesto de 2024, sin incluir los fondos MRR. Este monto también refleja un incremento superior al 60 por ciento respecto a 2015.

Gracias a esta inversión, se podrán implementar diversas iniciativas, como el transporte para estudiantes de bachillerato, la consolidación de las aulas digitales en áreas despobladas y el fortalecimiento del banco de libros. Además, se prevé una extensión gradual de la gratuidad educativa durante los próximos 2-3 años.

Otro objetivo es la incorporación de nuevo profesorado, lo que permitirá reducir las ratios en todos los niveles de educación infantil y bachillerato. Asimismo, se buscará cumplir con los contratos programas establecidos para las dos universidades públicas que operan en la región.

Las medidas de índole económico dispondrán de 1.200 millones adicionales en comparación con el año 2015.

El área de servicios sociales contará con un total de 963 millones de euros, lo que representa un aumento del 53 por ciento en comparación con el año 2015. Este incremento se traduce en 335 millones adicionales en términos absolutos. Con este presupuesto, se busca fortalecer la red de recursos asistenciales destinados a personas mayores y aquellas con discapacidad, lo que incluye la creación de más residencias, centros de día y viviendas. Además, se planea añadir 5.000 nuevos usuarios al servicio de teleasistencia e incrementar en un 20 por ciento la financiación destinada a la atención temprana.

En la última década, la cantidad de inversiones ha experimentado un crecimiento notable, alcanzando el doble de su valor anterior.

La inversión total se destinará a fomentar el empleo en la región, con un monto de 336 millones de euros; a la modernización del tejido productivo y empresarial, que contará con 1.500 millones; al incentivo de la transición ecológica, que recibirá más de 400 millones; así como a la modernización tecnológica de los servicios públicos, entre otros aspectos, mediante la nueva Agencia de Transformación Digital de Castilla-La Mancha, que dispondrá de 203 millones. También se fortalecerá el sector primario, excluyendo la PAC, con una asignación de 434 millones; y se duplicará la inversión en vivienda y transporte, alcanzando un total de 419 millones de euros para ambas áreas.

Respecto a las políticas de gasto enfocadas en fomentar el crecimiento y el empleo desde una perspectiva de sostenibilidad, Ruiz Molina ha especificado que se asignarán más de 3.000 millones de euros, lo que representa un incremento de 1.200 millones en comparación con 2015, es decir, un 64 por ciento.

En lo que respecta a las operaciones de capital, que se refieren a las inversiones destinadas a impulsar la actividad productiva y la expansión de infraestructuras en el sector de los servicios públicos, se dispone de un total de 1.459 millones de euros. Esta cifra representa el doble de lo que se había invertido en la última década.

El consejero ha señalado que la cantidad de recursos mencionada facilitará la modernización del tejido empresarial, así como la transición ecológica y la transformación digital e I+D. Además, se continuará con las inversiones en infraestructuras que buscan mejorar la calidad de los servicios públicos y se proseguirá con el desarrollo de infraestructuras esenciales que eleven la calidad de vida de los ciudadanos y ayuden a aumentar la competitividad empresarial.

En el transcurso de su presentación, el consejero hizo hincapié en la sección relacionada con el reto demográfico. Además, detalló que la Estrategia Regional frente a la Despoblación contará con un total de 2.037 millones, lo que representa un incremento del seis por ciento respecto a la asignación prevista en el presupuesto de este año.

En este contexto, el ministro de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital ha subrayado que el presupuesto presentado hoy se ha desarrollado con la “máxima ortodoxia financiera, priorizando la responsabilidad fiscal y la prudencia en las previsiones. Esto permite compatibilizar la congelación de la presión fiscal, el cumplimiento de los compromisos adquiridos y la contención de nuestra apelación al endeudamiento”.

En este contexto, se ha señalado que Castilla-La Mancha ocupa el tercer lugar entre las comunidades autónomas en cuanto a la disminución del peso de la deuda pública en relación con su Producto Interior Bruto desde 2015. Esta información proviene de los datos publicados por el Banco de España, que corresponden al segundo trimestre de 2024. Además, se estima que para 2025 la ratio podría bajar hasta el 29,7 por ciento.

El sistema de financiación autonómica y los ingresos son temas fundamentales en la administración pública. Este sistema determina cómo se distribuyen los recursos económicos entre las distintas comunidades autónomas, lo que influye directamente en su capacidad para ofrecer servicios a la ciudadanía.

Las comunidades autónomas dependen de una combinación de ingresos propios y transferencias del Estado para financiar sus actividades. Entre los principales componentes de este sistema se encuentran los impuestos, las tasas y las contribuciones que generan recursos para el funcionamiento de estas entidades.

Es importante destacar que, según el testimonio de Juan Pérez, un experto en finanzas públicas, “la equidad en la distribución de estos fondos es crucial para garantizar que todas las regiones puedan atender adecuadamente las necesidades de sus habitantes”.

Además, el sistema no solo afecta a la economía regional, sino también al desarrollo social y cultural. Por ello, es esencial revisar periódicamente cómo se llevan a cabo estas asignaciones y si realmente cumplen con su propósito de equidad y justicia social.

En resumen, el análisis de los ingresos y el sistema de financiación autonómica es vital para entender la realidad económica y social de cada comunidad. La correcta gestión de estos recursos puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida de sus ciudadanos.

Respecto a los ingresos no financieros, el responsable de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital ha señalado que un 68 por ciento de estos, lo que equivale a 7.257 millones, se origina en el Sistema de Financiación autonómica.

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La noticia en cifras

Con base en esta información, el consejero ha expresado de manera contundente y ha vuelto a enfatizar la solicitud que el Ejecutivo autonómico ha realizado en numerosas ocasiones. Esta solicitud consiste en “reclamar una reforma urgente del actual modelo, que garantice a todas las autonomías la misma financiación por habitante ajustado a fin de garantizar el acceso a los servicios públicos de todos, independientemente de su capacidad fiscal”.

Este presupuesto ha sido elaborado con el máximo rigor y prudencia, lo que permite que se logre la congelación de la presión fiscal, se cumplan los compromisos adquiridos y se limite la necesidad de recurrir al endeudamiento. Los principales objetivos que guiarán la gestión en 2025 están enfocados en impulsar el desarrollo económico, creando empleo y riqueza que se reparta de forma justa y solidaria. Como ha afirmado Juan Alfonso Ruiz Molina, “mejorar la calidad de vida y el bienestar de los ciudadanos y ciudadanas de Castilla-La Mancha, haciendo partícipes a todos de la riqueza que entre todos somos capaces de generar”.

La propuesta del concierto catalán ha sido rechazada de forma categórica, considerándola “injusta y egoísta”, ya que únicamente persigue privilegios fiscales para Cataluña a costa de las demás comunidades autónomas, lo que representa un grave ataque al principio de igualdad”. Por esta razón, ha subrayado la importancia de que “el nuevo modelo se acuerde de manera multilateral en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera, y no a través de acuerdos bilaterales que introduzcan nuevos conciertos económicos, los cuales vulneran el principio de igualdad que debe prevalecer en las relaciones entre regiones”.