El fiscal considera al procesado, J.F.N.R. autor de un delito de abusos sexuales a menores de trece años.
Según el escrito de conclusiones previas del ministerio público el acusado, que mantenía una relación sentimental con la madre de la niña, entre en la habitación en la que la menor dormía la siesta en septiembre de 2016 "con ánimo de satisfacer su deseo sexual".
Tras entrar en la habitación se bajó los pantalones, se acostó al lado de la menor y comenzó a masturbarse, al tiempo que intentaba bajarle los pantalones tocándole el glúteo por encima de la ropa.
Sin embargo, ante la resistencia de la menor, el procesado abandonó finalmente la habitación.