El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado en su reunión de este martes la declaración de las Casas Colgadas de Cuenca como Bien de Interés Cultural (BIC) con la categoría de Monumento. Un reconocimiento con el que se protege el valor patrimonial de este emblemático edificio, símbolo icónico de la capital conquense.
El vicepresidente del Gobierno regional, José Luis Martínez Guijarro, que ha asistido hoy en Cuenca a los actos organizados con motivo de la Festividad de la Virgen del Pilar, patrona de la Guardia Civil, ha subrayado que las Casas Colgadas de Cuenca son un ejemplo del patrimonio cultural de la región, así como un buen ejemplo de la arquitectura popular que destaca por su emplazamiento, íntimamente ligadas a la hoz del Huécar.
Martínez Guijarro ha subrayado la importancia de este acuerdo pues, aunque son un emblema de la ciudad ampliamente reconocido en todo el territorio nacional, aún no contaban con una protección patrimonial específica. Así, esta medida supone un claro avance con respecto a la situación anterior, ya que se asegura la protección del conjunto de edificios que integran las Casas Colgadas, en un momento marcado por la realización de importantes obras de conservación que tienen la doble finalidad de frenar su deterioro, modernizar espacios y ampliar el Museo de Arte Abstracto Español.
Con esta medida, el Gobierno regional cumple con el objetivo de la Ley de Patrimonio de Castilla-La Mancha al proteger, conservar y enriquecer el patrimonio cultural existente en nuestra Comunidad Autónoma, para su difusión y trasmisión a las generaciones venideras y el disfrute de la actual generación. Del mismo modo, se cumple con el objetivo de protección y realce del paisaje y del patrimonio histórico y artístico.