De este modo, el embalse de Entrepeñas ha perdido cinco hectómetros y se queda con 353 de los 835 que puede almacenar, mientras que el de Buendía ha perdido otros cinco hectómetros y almacena 513 sobre una capacidad total de 1.639.
En cuanto al resto de los embalses de la provincia de Guadalajara, uno han bajado sus reservas y el resto se han mantenido invariables. Así, el de Bolarque ha perdido un hectómetro y se queda con 24, de los 31 almacenables.
El resto han mantenido sus reservas, de manera que el embalse de Alcorlo acumula 104, de un total de 180; el de Almoguera mantiene seis hectómetros, a uno de su máximo; el de El Atance se queda con 14, de los 35 que puede almacenar, y el de Beleña se queda con 46 hectómetros, a siete del máximo que puede almacenar;
Del mismo modo, el de Palmaces mantiene 23 hectómetros, de los 31 que puede albergar; el embalse de La Tajera se queda con 34 de los 59 que puede almacenar; y el de El Vado mantiene sus 47 hectómetros, a nueve de su máximo embalsable.
De otro lado, el embalse de Molino de Chincha, en la provincia de Cuenca, ha perdido un hectómetro, por lo que se queda con cinco, a uno del máximo de su capacidad.