de personas que han asistido al funeral por Laura del Hoyo, una de las dos jóvenes asesinadas en Cuenca a manos, supuestamente, del exnovio de Marina Okarynska, la otra chica.
La ceremonia ha sido concelebrada por trece sacerdotes, entre ellos el vicario general de la Diócesis de Cuenca, Antonio Fernández.
Entre escenas de dolor y un fuerte aplauso, el féretro ha llegado a las 11:15 horas al templo, donde esperaba la familia de Laura.
Durante la homilía, el párroco, José María Alcázar, se ha dirigido a los familiares para intentar darles consuelo y les ha dicho que "el amor es mucho más fuerte que la rabia y el dolor".
También ha recordado el sacerdote que en esta iglesia Laura del Hoy fue bautizada y recibió la primera comunión.
Centenares de personas despiden a Marina
Centenares de conquenses han acudido esta mañana a la parroquia de San Esteban para dar su último adiós a la joven Marina Okarynska, asesinada en Cuenca al igual que su amiga Laura del Hoyo, que también ha sido despedida esta mañana en la iglesia de San Fernando.
Poco después de las 11:30 horas ha llegado a las puertas de la iglesia el coche fúnebre y un caluroso aplauso ha recibido al féretro de la joven, que tenía 26 años.
Familiares, amigos, compañeras de trabajo de Marina, muchos de ellos jóvenes que expresaban su dolor y tristeza, y representantes institucionales como el alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, y el delegado de la Junta, Ángel Tomás Godoy, han asistido a la ceremonia religiosa.
El funeral lo han oficiado sacerdotes católicos y, también, uno del rito grecocatólico para atender a la familia ucraniana, y en la homilía el sacerdote ha dicho que "Cuenca entera ha estado herida, sin distinción de países y procedencias".
A la iglesia han llegado una docena de coronas de flores, de sus padres y hermana, de lugares en los que trabajó la joven y varias institucionales, con un mensaje "No te olvidaremo".
Tras los funerales Marina Okarynska y Laura del Hoyo serán enterradas esta mañana en el cementerio municipal de Cuenca.