meses de cárcel, multa de 1.560 euros y 16 meses sin permiso de conducción porque la guardia civil lo interceptó conduciendo sin carnÉ, hablando por el móvil y, además, se dio a la fuga en lugar de parar a petición de la autoridad.
Los agentes, según la sentencia a la que ha tenido acceso Europa Press, lo sorprendieron cometiendo las infracciones el pasado domingo, 13 de julio, cuando circulaba por Balazote (Albacete) utilizando el teléfono y sin el obligado permiso de conducir, por lo que fue sometido a juicio rápido el lunes, en este juzgado, al reconocer los hechos.
La sentencia recoge que la condena a C.I.B. ha sido por un delito de conducción temeraria, otro de conducción sin permiso, y una falta de desobediencia, aunque la pena de prisión se ha suspendido por dos años, a condición de que no vuelva a delinquir.
Los hechos se produjeron el domingo, a las 8.00 horas, cuando el acusado iba por el casco urbano de este pueblo albaceteño y los agentes de la Guardia Civil le dieron el alto, al sorprenderlo cuando "iba conduciendo y hablando por el móvil".
C.I.B. "hizo caso omiso" a la petición de parar, señala la sentencia, que añade que aceleró "de forma brusca" y que trató de huir por una calle en dirección prohibida "rebasando hasta tres cruces", lo que obligó a los conductores con los que se encontraba a realizar maniobras evasivas para no chocar contra él.
En esa huida, el acusado circulaba a una velocidad "excesiva", de "unos 70 kilómetros a la hora" y que hizo que algunos peatones tuvieran que apartarse, "ante el riesgo de ser atropellados". Al llegar a la carretera, se saltó un stop y luego dio marcha atrás, "obligando a los agentes a apartarse" para evitar ser arrollados.
Cuando por fin fue detenido, los agentes se acercaron para identificarlo pero el acusado dio marcha atrás y provocó que los agentes "tuvieran que esquivarlo para evitar ser atropellados", tras lo que volvió a escapar "a gran velocidad" por las calles de Balazote.