a que lleven a cabo en estas fechas un consumo responsable de alimentos que contribuya a reducir, en la medida de lo posible, el desperdicio alimentario que suele incrementarse con ocasión de las celebraciones que tienen lugar estos días.
Asimismo, se pretende que los alimentos no consumidos puedan ser redistribuidos de forma eficiente mediante las iniciativas solidarias emprendidas por los bancos de alimentos y otras organizaciones con fines sociales.
Igualmente, la Dirección General de Salud Pública y Consumo invita al sector hostelero y turístico a que ajuste su oferta de comidas elaboradas a las cantidades que vayan a ser consumidas de manera que se minimicen las pérdidas de alimentos. Asimismo se les anima, junto al sector de la distribución de estos productos de consumo, a que pongan a disposición de organizaciones con fines sociales y solidarios sus excedentes alimentarios, siempre y cuando se garantice una adecuada seguridad alimentaria de dicho aprovechamiento.
En todo caso, conviene recordar las recomendaciones que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) propone para cambiar los hábitos y estilos de vida de las personas consumidoras hacia un desperdicio alimentario cero, como servir o comer porciones de comida más pequeñas en casa y compartir con amigos en los restaurantes, en caso de que las porciones sean muy grandes; guardar los alimentos no consumidos para otra comida o utilícelos en un plato diferente; comprar sólo lo que necesite, haciendo una lista de lo que se necesite, y, sobre todo, no comprar más de lo que se pueda consumir.
Además, se puede comprar frutas y verduras ‘feas’ o irregulares, ya que señalan que son igual de buenas, pero un poco diferentes; almacenar los alimentos a una temperatura entre 1 y 5 grados centígrados para una frescura y una vida útil máximas; y trate de usar productos que había comprado anteriormente, moviendo los productos más viejos al frente y colocando los más nuevos en la parte posterior.
Asimismo, aconsejan entender las fechas, como el ‘Consumir preferentemente antes de’ significa que la calidad del alimento es mejor antes de esa fecha, pero sigue siendo seguro para el consumo después de ésta; indican que algunos desperdicios de alimentos pueden ser inevitables, así que ¿por qué no instalar un contenedor de compost?; o donar el excedente.
En los últimos tres años, la Consejería de Sanidad está emprendiendo diversas actuaciones para evitar el desperdicio de alimentos en la región. El objetivo es que la sociedad en general tome conciencia y se implique en un consumo de alimentos sostenible y responsable.
Los ciudadanos que lo deseen pueden encontrar en la página web Sanidad Castilla-La Mancha, http://sescam.castillalamancha.es, y en www.castillalamancha.es/sanidad, consejos y recomendaciones para reducir el desperdicio alimentario y promover la sensibilidad en el consumo, especialmente durante estas fechas tan señaladas, así como potenciar las aportaciones a los bancos de alimentos de la región.