Viajar en barco mejora con creces la experiencia de viajar. Para ello hay que contar con tiempo y se puede llevar el coche en el ferry para usarlo una vez llegado a puerto.
Desde www.ok-ferry.es se pueden ver las tarifas y la forma de crear una buena ruta entre ciudades portuarias a precios muy económicos, viajando de una manera cómoda y muy relajada.
Las opciones de destino son cada vez mayores gracias a las grandes líneas de ferries que pueden llegar a conectar con el continente africano. En los ferries, la relación con el personal de la tripulación es más fácil y entrañable ya que no se cuenta con las prisas de otros medios de locomoción, pudiendo aprender de cada lugar a través de los testimonios de las personas que nos acompañan en los viajes, inclusive de los secretos del mar.
En el interior de estos barcos hay zonas de bar y de restaurante, incluso zonas de relax, algunas de ellas en cubierta, lo que hace que se pueda viajar contemplando las estrellas con la brisa en el rostro, lo que de por sí ya forma parte de la experiencia distintiva del viaje.
Interactuar con los demás viajeros es mucho más fácil en ferry que en otro tipo de transporte, ya que en el mar el tiempo parece detenerse y el viajero puede crear una simbiosis perfecta con el entorno natural.
El precio de los billetes de ferry se mantiene durante las diferentes temporadas
Claro que también se puede disfrutar de las comodidades de un camarote para descansar en los viajes nocturnos e incluso poder hacerlo acompañado de mascotas, ya que estas pueden viajar en los ferries, en zonas aptas para ellas que se pueden visitar a todas horas.
El precio de los billetes de lo ferries no suben o bajan según la temporada en la que se viaje si no que se mantienen fijos, lo que da tranquilidad al viajero que podrá realizar su ruta sin sorpresas de última hora.
Poder conocer las ciudades costeras españolas viajando en ferry es una de las ventajas de optar por este medio de locomoción. Se entrará a las ciudades a través del mar, lo cual ya abre un nuevo punto de vista y conocerlas tranquilamente, como se ha viajado.
Málaga, Algeciras, Barcelona o Almería son cuatro ciudades muy distintas entre sí y de una inmensa riqueza cultural y artística que se pueden conocer viajando en ferry.
Tánger, Génova, la isla de Malta, cada una de las islas Baleares y muchos otros lugares se pueden conocer viajando en ferry, un lugar apto tanto para parejas como para amigos e incluso para familias con niños, que no sólo vivirán las aventuras llegados a destino sino que el mismo viaje ya será una de ellas, puesto que se viajará por el Mar Mediterráneo, cuna de las civilizaciones más antiguas, por donde se han fusionado las culturas.
La grandeza del mar Mediterráneo
Este mar con más de 1.500 metros de profundidad, posee una gran biodiversidad marina, con 17.000 especies y solo supone un 1% de la masa oceánica del mundo.
Sentir que esto y mucho más es lo que se tiene bajo los pies a la hora de viajar, hace que la experiencia sea mucho más bonita y excitante, sobretodo si nos encontramos con una foca monje, una de las especies exclusivas de este mar protagonista tanto en las grandes contiendas históricas como en los viajes de placer de la actualidad que los viajeros más sibaritas saben apreciar como nadie, ya que son ellos los que reconocen la belleza de estar haciéndolo de este modo, en contacto con la naturaleza.