Según se indica en el escrito de acusación del fiscal, los hechos se remontan al otoño de 2013, cuando el acusado Javier A.D., que entonces tenía 19 años, usó la red social Tuenti para contactar con la menor, para lo que utilizó una cuenta en la que se hacía llamar con otro nombre y se rebajaba su edad a 16 años.
El acusado simuló que iría a ver a la menor a su municipio de residencia, y comenzó a pedirle "que le mandara fotos desnuda o en ropa interior", y como ella se negó "siguió insistiéndole", consiguiendo al final la niña le enviara "una foto en ropa interior", apunta el ministerio público.
A partir de esa conversación, comenzó a decirle a la menor "que le iba a mandar fotos de él mismo desnudo, para que así ella también le mandara a él", y aunque ella se negó a recibir las imágenes del chico y le contestó que era algo "asqueroso", Javier A.D. terminó enviándole dos fotos "en las que salía desnudo, enfocando a sus genitales".
Para el fiscal este comportamiento constituye un delito de exhibicionismo, por el que pide que el procesado sea condenado a nueve meses de prisión.
Después el acusado "volvió a insistir" a la niña para que le mandara fotos desnuda, y como ésta se negó "en tres ocasiones", Javier A.D. le dijo "que si no le enviaba la foto desnuda subiría a Tuenti la foto que tenía suya en ropa interior".
Y aunque no llegó hacerlo, el fiscal entiende que es un delito de amenazas, por el que pide que el acusado sea condenado a dos años de prisión y a que se le prohíba comunicarse con la menor durante cinco años.