La investigación de los hechos, de los que ha informado hoy la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha en nota de prensa, comenzó a finales del mes de septiembre por el aviso de los vecinos.
Estos trasladaron a la Policía Nacional sus sospechas sobre un matrimonio que había alquilado una vivienda y siempre mantenían las persianas bajadas y los aparatos del aire acondicionado en marcha durante el día y la noche.
Además, los vecinos advirtieron de que no se había realizado mudanza de mobiliario al chalet, a pesar de que había sido alquilado vacío.
Los agentes registraron la vivienda el pasado miércoles 5 de octubre e intervinieron 1.477 plantas de marihuana.
Además, detuvieron a uno de los moradores, un varón de nacionalidad extranjera a quien se le imputa un delito de tráfico de drogas, mientras que continúan las gestiones para localizar a la mujer, que se encuentra fuera del territorio nacional.
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