. El edil ha puesto como ejemplo dos edificios emblemáticos, con historia en Albacete y que están abandonados: Simago y Legorburo.
En el caso del edificio Simago, según ha contado Pedro Soriano, las cristaleras están sucias y las instalaciones del interior se encuentran en mal estado, mientras que las fachadas del Legorburo se han convertido en vallas publicitarias. “El equipo de Gobierno no puede permitir que estos dos edificios históricos se encuentren en un estado lamentable y que uno de ellos se destine a fines publicitarios”, ha destacado.
“Los edificios Simago y Legorburo se encuentran en la arteria principal de Albacete, en dos de las calles más importantes para nuestra historia arquitectónica, Tesifonte Gallego y Marqués de Molins. Ambos dan una mala imagen a los turistas que visitan la ciudad y repercuten en el pequeño comercio del barrio Centro”, ha reiterado.
En ese sentido, Soriano ha criticado la gestión del alcalde reprobado, Javier Cuenca, en el barrio Centro, y le ha pedido que trabaje por y para los ciudadanos. Según ha dicho, “después de unos ocho meses como alcalde, debería de empezar a trabajar en los barrios y dejar aparcado el egocentrismo y el narcisismo”.