Este sábado, día 14 de noviembre, tuvo lugar la vigésimo quinta de las rutas que la Diputación Provincial de Albacete organiza dentro de la II Edición de Rutas de Senderismo, en la que los participantes se desplazaron hasta la Sierra del Segura para descubrir el entorno y los comienzos de Riópar.
La ruta se denominaba “Ruta Medieval a Riópar Viejo”, con una dificultad técnica baja, un recorrido circular, de alrededor de 12 kilómetros de distancia, y aproximadamente cinco horas de duración.
La actividad comenzaba un poco más tarde las 9 de la mañana, tras la presentación por parte de los cinco miembros de la primera promoción de guías de montaña titulados de Riópar, que nos fueron indicando y explicando todo lo que íbamos viendo, al tiempo que relatando historias y leyendas de la zona. En www. Riópar .k25.net podrán comprobar todos sus trabajos y conseguir bastante información.
Empezamos a caminar con un sol radiante desde la Plaza Luis Escudero, en el centro del pueblo, donde se encuentra el ayuntamiento del municipio. Callejeamos hasta salir al Puente de la Herrería para coger la vía verde en dirección a Riópar Viejo, una preciosa pista paralela al Río de la Vega, uno de los dos que pasa por Riópar junto al Río Mundo, justo al frente podemos observar uno de los picos más altos de la zona, El Padroncillo de 1584 metros de altura, llegamos al Mirador de Aves, un lugar privilegiado donde se pueden ver gran cantidad de aves que habitan o pasan por el bosque de galería que rodea al rio de la Vega, aunque no es el caso ya que la época no es la propicia para ello, también podemos observar nuestro destino, Riópar Viejo, encaramado en lo alto de un montaña con una situación espectacular.
Continuamos la cómoda Vía Verde y giramos a la derecha para atravesar el Río de la Vega y seguidamente la Carretera Cm-412 que comunica Alcaraz con Riópar, y empezamos la subida. Al poco de hacerlo nos detenemos en el Cortijo de la Humildad para ver dos espectaculares ejemplares de encinas centenarias, con un perímetro de 4,7 metros. Desde aquí las vista empiezan a ser impresionantes, se observa todo el valle con los colores típicos otoñales de las pocas hojas que todavía quedan en los álamos, robles y nogueras que pueblan esta zona, junto a pinos y encinas. También se puede observar el Padroncillo, el cortijo del Búho y la Dehesa, pedanía de Riópar, donde se han encontrado diferentes utensilios de la edad de piedra.
Continuamos nuestro ascenso hasta llegar a Riópar Viejo, el tramo final por carretera, y llegamos a un mirador con unas bonitas vistas, El Mirador del Valle, desde aquí podemos divisar el valle de Riópar, y a los pies de donde nos situamos vemos el yacimiento neolítico de la Marija, que fue un asentamiento hasta la cultura del bronce inicial, por lo que fueron los primeros pobladores de Riópar Viejo y desde entonces habitado ininterrumpidamente hasta el año 1995 que murió el ultimo poblador de la zona, por lo que han pasado las cultural de Bronce, Romanos, Visigodos, Islámicos y por ultimo Castellanos. A partir del 1999 vuelve a poblarse con algunos vecinos, y poco a poco con el esfuerzo de la gente han ido conservando y recuperando un pueblo precioso, respetando las construcciones tradicionales, muchas de ellas hoy día utilizadas como alojamientos rurales, desde luego con una localización privilegiada.
Gracias a esto siguen en pie, ya que al crear en el valle, año 1772, la primera fábrica de producción de latón de España, poco a poco, a lo largo de estos dos siglos, el abandono del Viejo Riópar se ve compensando con el poblamiento de las Fábricas de San Juan de Alcaraz que pasa a llamarse a principios de los 90 Riópar o Riópar Nuevo. El primitivo enclave, origen del actual y más antiguo, pasa a ser Riópar Viejo.
Con estas maravillosas vistas almorzamos, después visitamos el pueblo, primero la fuente del Olmo, que en la actualidad el agua viene mediante un sifón desde Fuente Grande pero no ha sido así siempre. Ya los árabes la trajeron por este sistema el agua desde la fuente de la Toba, alrededor de la peña encontramos diferentes fuentes que abastecían al poblado y su castillo como la fuente del Peral, o la fuente del Berrocal.
Desde aquí ascendemos al castillo-fortaleza del siglo XII de origen Islámico. Hoy en día sólo se conservan restos del lienzo defensivo y algún torreón, que ccomparten en la actualidad con uno de los dos cementerios del pueblo.
Desde lo alto la visión es espectacular, podemos ver gran parte de los picos más altos de la zona, la Almenara, el Padroncillo, La Sarga,… al igual que el Hueco de Los Chorros en el Parque Natural Calares del Mundo y de la Sima y todo el valle de Riópar, una visión de 360º a cada cual más impactante.
Bajamos de nuevo y nos dirigimos a la Iglesia del Espíritu Santo, del siglo XV, formada por una planta rectangular con cinco tramos separados por arcos diafragma y cabecera plana, unos frescos góticos fueron descubiertos en las paredes y denominados “Las Edades de Riópar”, también podemos observar una Pila Bautismal de piedra antiquísima y el imponente campanario, una construcción Románica.
A la entrada de ésta encontramos una Plaza empedrada circular, donde se celebra la Romería por La Virgen de los Dolores, patrona del Municipio.
Ya desde aquí comenzamos el descenso para realizar la vuelta hasta Riópar, por el lado opuesto de donde hicimos la ida, hasta enlazar de nuevo cruzando la carretera por la vereda de Bogarra hasta la Vía Verde de nuevo que nos llevara hasta el pueblo, donde el Restaurante “San Juan” tenía a bien agasajar con su maravillosa cocina.
Tras la comida y el reposo pudimos visitar el Museo de las Reales Fábricas de San Juan de Alcaraz, donde pudimos contemplar como trabajaban el Bronce del que hizo surgir este maravilloso Municipio.
La próxima ruta será el domingo día 22 de noviembre en Bogarra , denominada “Ruta por los Cárcavos”, una marcha de 16 kilómetros de distancia, de una dificultad técnica baja-media con salida a las nueve de la mañana desde el municipio de Bogarra.