El próximo lunes tendrá lugar la segunda conferencia del ciclo “Personajes toledanos del siglo XX”, por Enrique Sánchez Lubián

En los primeros años del siglo XX las revistas literarias tuvieron un gran auge, acogiendo en sus páginas a escritores como Eduardo Marquina, Felipe Trigo, José Francés, “Colombine”, Eduardo Zamacois, Emilio Carrere, Rafael Cansinos Assens o Andrés González Blanco, quienes cultivaron con maestría la novela corta y el cuento. Entre ellos destacó por derecho propio el toledano Emiliano Ramírez Ángel, quien compaginaba esta labor creativa con su profesión de periodista.

Ramírez Ángel nació en Toledo el 20 de julio de 1883. Escritor precoz, tras comenzar a publicar en semanarios toledanos como “La Idea” o “La Campana Gorda”, en 1906 consiguió que su novela “La Tirana” fuese premiada en un concurso convocado por “La Novela Ilustrada”, publicación creada por Blasco Ibáñez. Este éxito le franqueó acceso al salón literario que animaba Carmen de Burgos, “Colombine”, donde empezó a relacionarse con numerosos escritores de la época. Entre ellos estaba Ramón Gómez de la Serna, quien le convirtió en uno de sus colaboradores más directos para su prestigiosa revista “Prometeo”, así como asiduo participante en su famosa tertulia del Café de Pombo.

Tras permanecer unos años en París, como redactor literario de la editorial Hispano-Americana, regresó a España, consiguiendo gran popularidad como máximo exponente del madrileñismo literario, convirtiendo a sus clases populares y medias en protagonistas de sus novelas, relatos, cuentos y obras de teatro, llegando a ser considerado heredero de Mesonero Romanos. En Venezuela, donde vivió una temporada, puso en marcha la editorial “Victoria”.

Redactor jefe del semanario “Blanco y Negro”, en 1923 fue ganador del Premio “Mariano de Cavia”, distinguiéndole el Ayuntamiento de Toledo con el título de “Hijo Predilecto”. Aunque su actividad profesional se desarrollaba en Madrid, Ramírez Ángel mantuvo su relación con la ciudad de Toledo, colaborando con numerosos publicaciones locales y asistiendo a numerosos actos públicos en la capital.

Tras la muerte de Galdós, de quien fue buen amigo, promovió, junto a los hermanos Álvarez Quintero, la construcción del monumento dedicado al escritor canario en el Parque del Retiro de Madrid, obra ejecutada por Victorio Macho.

Emiliano Ramírez Ángel falleció prematuramente, a la edad de 45 años, en 1928 tras una operación estomacal. La noticia de su muerte causó gran impresión en la ciudad de Toledo, celebrándose sufragios tanto en la Catedral Primada como en la capilla de la Sala Capitular del Ayuntamiento.

La extensa obra literaria de Ramírez Ángel, considerada hoy como menor, es expresión de una época en que las clases medias urbanas se afianzaban como factor de modernidad y cambios sociales. Ese empeño se vio recompensado con un gran reconocimiento popular, importantes premios -entre ellos el “Chirel” de la Real Academia Española- y la estima de la mayoría de escritores y creadores de la época. Un busto suyo, obra de Victorio Macho, se conserva en el museo dedicado al escultor palentino que la Real Fundación de Toledo mantiene en Roca Tarpeya.

El conferenciante: Enrique Sánchez Lubián

Enrique Sánchez Lubián (Alcázar de San Juan, 1956) es licenciado en Ciencias de la Información. Ha sido colaborador y redactor de publicaciones como “Lanza” “Cuadernos Manchegos”, “Cuadernos para el Diálogo”, “Posible”, “Interviú”, “Ciudadano” y del diario “Ya-Toledo”.

Técnico Superior de Administración Especial es, desde 1987, Jefe del Gabinete de Prensa del Ayuntamiento de Toledo. En 1994 fue galardonado con el Premio “Espejo” de la Asociación de la Prensa toledana por su labor en pro de la transparencia informativa desde una institución pública. En 1995 ganó el Premio “Santiago Camarasa” de Periodismo por sus columnas en “Diario 16”.

Autor, y coautor, de una treintena de libros, entre ellos “Maestros Artesanos de Castilla-La Mancha”, “El Gran Libro de los Vinos de Castilla-La Mancha”, “Besteiro: Años de Juventud”, “El Reloj de la Cárcel. Poesías y Leyendas Toledanas de Francisco Machado”, “Toledo, la ciudad de la memoria”, “Emelina, la belleza que alumbró a la República”, “Domingo Alonso, apóstol del socialismo toledano”, “El alcalde de Toledo hace saber” o “Cien fotografías de Toledo que deberías conocer”, estas dos últimas junto al director del Archivo Municipal de Toledo, Mariano García Ruipérez.

Ha prologado las recientes reediciones de “Don Amor volvió a Toledo” de Félix Urabayen y “Ángel Guerra” de Galdós.

Fue secretario y presidente de la Asociación de Amigos de la Biblioteca de Castilla-La Mancha (2004-2008). Forma parte del grupo coordinador de la revista “Archivo Secreto” editada por el Ayuntamiento de Toledo. Colabora con el suplemento “Artes & Letras Castilla-La Mancha” del diario “ABC” y publica una columna semanal de opinión en “La Tribuna de Toledo”.