Según ha informado hoy la Policía Local, los hechos tuvieron lugar en la avenida del Príncipe Felipe número 27, donde se personaron los agentes después de ser requeridos desde la sala de control por la presunta agresión de un padre a su hija.
En dicho lugar, fuera de servicio, se encontraban dos policías locales, uno de la plantilla de Talavera y otro de Madrid, que colaboraron con la patrulla actuante.
Durante el interrogatorio, el padre manifestó que la agresión se debió a que la menor, que había salido de casa con sus amigos, no compareció a la hora que le había indicado.
El progenitor le provocó varias lesiones en la cara a su hija, tales como sangrado de nariz y un diente incisivo roto, motivo por el que tuvo que ser trasladada para su atención al Hospital Nuestra Señora del Prado.
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