www.albaceteabierto.es

La pescadilla que se muerde la cola

Por Miguel Ángel Vicente
jueves 09 de junio de 2016, 04:16h
Miguel Ángel Vicente
Miguel Ángel Vicente

El Partido Popular, a lo suyo, como quien oye llover, como si la cosa no fuera con él, como si tuviera en sus manos la pócima de fierabrás y sólo bastara con su voluntad o su empeño en hacer que las cosas, que ahora van de mal en peor, a pesar de la propaganda oficialista, que usa todos sus medios para templar gaitas, cambien y de un casi infierno, o, al menos, purgatorio por el que atraviesa España, nos hallemos, por arte de birlibirloque, en el cielo gozando de la gloria.

Viene esta introducción a colación, con el erre que erre, con esa proclama de nuestro Presidente del Gobierno, en funciones, Don Mariano Rajoy Brey, de que bajará los impuestos, allá por el mes de Enero de 2.017, si los españoles tenemos a bien votarle y convertir su Presidencia en funciones, en una Presidencia del Gobierno, fija, por cuatro años más, al menos, lo que no aplica, sin embargo, a las medidas para que el empleo que se cree, jaleado por sus acólitos  hasta con palmas dadas con las orejas, de ser un empleo mísero, en su remuneración, y rácano en su duración, generalmente, como mucho, no más de tres meses, cuando no de semanas o, incluso, días u horas, con el objeto de camelarnos a los contribuyentes que no ya ciudadanos, olvidándose de aquella promesa pomposa que hizo en la campaña previa a las elecciones de Noviembre de 2.011, que le valió para auparse a dicha Presidencia con una mayoría absoluta como no había tenido ningún Partido Político tras la restauración de la democracia española. ¡Cuán incautos fuimos en creer a pies juntillas en la seriedad de un Partido que se vanagloriaba de tal y así nos lució el pelo!. A las primeras de cambio, o sea, la primera en la frente, como ya lo califiqué en su día, primer Consejo de Ministros en Diciembre de 2.011 y mi gozo en un pozo, una subida bestial del IRPF y a renglón seguido y a plazos, una correlativa subida de otros impuestos, algunos como el IVA, del 19 al 21%, que acabó con la ilusión de quienes habíamos confiado ciegamente en un gestor que iba a enderezar el rumbo de la Nación Española y que iba a sacarnos las castañas del fuego en que las habían metido los desmanes de un José Luis Rodríguez Zapatero, que gobernaba a golpe de ocurrencias.

Pues bien, ese guante lo ha recogido su fiel escudero y martillo de herejes, Don Cristóbal Montoro, a la sazón, también en funciones, Ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, que cree que hay margen para bajar impuestos el año que viene, con efectos a partir del año 2.017, lo que ya supone un primer ajuste a la promesa, bajando el mismo en dos puntos lineales en todos sus tramos, que pasarían, el mínimo del 19% al 17% y el máximo del 45% al 43%, y se realizaría de forma gradual, en varias etapas, con lo que ya nos encontramos con otro ajuste que rectifica esa pomposa y amplificada rebaja de impuestos, sobre todo el del IRPF, que es el que atormenta, junto con el IVA, a la generalidad de los contribuyentes, que no ciudadanos, españoles.

Y todo ello fiado a un futurible, o sea, a la confianza en que la economía española mantenga un ritmo de crecimiento que, como mínimo, llegue al 3% del PIB, si es que no lo superamos, que ya sabemos que puestos a propalar fuegos artificiales, para qué nos vamos a conformar con un céntimo de euro si podemos aspirar a millones de tal moneda, que así somos los españoles de confiados y de soñadores, esperando siempre un milagro de la primavera y en la posibilidad de recoger peras del olmo.

Asimismo, como ya vaticinó la Vicepresidenta del Gobierno, también en funciones, Doña Soraya Sáenz de Santamaría, llegando en esa nueva legislatura a los veinte millones de empleados y cotizantes a la Seguridad Social, esto va a ser cosa de escándalo y todos los miembros de la Unión Europea, incluidas la Comisión Europea y la cancillera Frau Merkel, inclinarán sus cabezas ante el paso firme y marcial de nuestro Mariano Rajoy Brey, sobre cuya cabeza, seguramente y qué menos, depositarán una corona de laurel, como se acostumbraba hacer con los emperadores romanos que regresaban triunfadores a Roma con sus legiones gloriosas.

Y no sólo esto, que sería poco, dada la grandeza de nuestros gobernantes, en funciones, que, incluso, vaticinan, la posibilidad de una rebaja de las cotizaciones sociales, sin tener en cuenta que la hucha o fondo de las pensiones ha empezado a tocar fondo, y de los 66.815 millones de euros con que contaba cuando el PSOE dejó el Gobierno en el año 2.011, durante la legislatura de Don Mariano y Don Cristóbal, ha menguado hasta los 32.481 millones de euros, más de la mitad, habiendo sido el pellizco o la mordida que el Gobierno del PP, tan diligente como buen gestor, le dio en el año 2.015 de 13.250 millones de euros. Estas cifras, al ritmo que van, acabarían dando al traste con la citada hucha, probablemente en el año 2.019, lo que ha encendido las alarmas, ¡a buenas horas, mangas verdes!, en los Partidos Políticos que aspiran a hacerse con el Poder del Estado el próximo 26 de Junio, proponiendo algunos, como el PSOE un Impuesto Especial a las fortunas más altas, en cuya línea se alinean, también, Unidos-Podemos, que ya sabemos que, al menos, son una hidra de dos cabezas, aunque matizando que debiera realizarse una reforma fiscal integral y no establecer un impuesto específico para este menester, mientras el propio PP cree que deberían ser financiadas con cargo a los Presupuestos Generales del Estado, tal como ya lo son los complementos a mínimos y las pensiones  no contributivas, mas siéndolo con cargo a los Presupuestos, ¿no lo serán con cargo a una subida de impuestos, aunque no se cree un impuesto especial para tal fin?.

Y mientras estas cosas suceden, el déficit del Estado del primer trimestre de este año 2.016 se ha desbordado, la deuda pública supera, por primera vez en 107 años, el billón de euros y los ajustes que nos está exigiendo Bruselas superan los 8.000 millones de euros, sin contar con la posible sanción que planea por parte de la Comisión Europea sobre España y cuantificada en, al menos 2.000 millones de euros, por no haber contenido el déficit (en el 5’1%) en el límite que la misma había marcado para España.

En fin, con estos antecedentes y con estas premisas que están sobre la mesa, díganme Vds. si no nos hallamos ante una nueva “boutade” de nuestro ínclito Presidente, en funciones, del Gobierno, Don Mariano Rajoy Brey. Pero, en fin, aún parece que algunos siguen creyendo el cuento de la lechera y que no son pocos quienes aún creen que los burros vuelan y están dispuestos a comulgar con ruedas de molino y a tragarse carros y carretas. Y eso, que según no se cansan de vociferar desde el PP, éste es el partido de la sensatez, la honradez y el saber hacer, el buen gestor que todos quisiéramos tener en casa, y que fuera de él no hay luz, ni salvación e imperará el caos, las tinieblas, la oscuridad y quedaremos sometidos a un ejército de orcos y de trols, que harán de nuestra vida un infierno permanente. ¡Pues que venga Dios y lo vea!.

Volviendo a la rebaja de impuestos, que es una película que ya está en el archivo de la filmoteca, Don Cristóbal Montoro sostiene, con un morro que se lo pisa, que la bajada de impuestos era un eslogan en las elecciones de 2.011, pero que ahora “sí es un compromiso”, o sea, como lo de que “Hacienda somos todos”, según la Abogada del Estado Jefa de Palma de Mallorca Doña Dolores Ripoll, se trataba de un mero slogan publicitario. Así mismo, considera que la previsión oficial de crecimiento para este año 2.016, del 2’7%, pactado con la Comisión Europea se queda corta y que en la segunda mitad del año alcanzará el 3%. Añade que siempre que el PP gane las elecciones “la economía no va a empezar en la segunda mitad del año, todo lo contrario”, lo que unido al incremento de la recaudación nos hará poco menos que subir a la luna sin cohete de por medio, lo que no encaja del todo con la realidad ya que durante los primeros cuatro meses de este año 2.016 la recaudación se ha contraído un 8%. Nos encontramos de nuevo con aquél Montoro del año 2.011 que en un mítin del PP en Albacete, en el que estuve presente, despotricaba contra la política económica y la subida de impuestos llevada a cabo por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, recalcando y proclamando que la solución para superar la crisis no estaba en la subida de impuestos, sino en la bajada de los mismos (tal como según él mismo siempre había hecho el PP), y ahora, tras la marcha atrás llevada a cabo en la anterior legislatura, el ínclito vuelve a utilizar las mismas claves para arañar votos como sea. Así mismo, abundando en ello, el Presidente del Gobierno en funciones y candidato del PP a las elecciones del 26 de junio próximo, Mariano Rajoy, aseguró el pasado día 3 en una entrevista en TVE, que es compatible reducir el déficit y crear empleo: “las cosas bien hechas permiten bajar impuestos, reducir el déficit, crecer y crear empleo” y no tiene intención en recortar en gasto público.  Mariano: ¿qué has estado haciendo durante cuatro años en La Moncloa que no has aplicado tu filosofía astral?. Y por si fuera poco, con desprecio, se refiere a los demás candidatos a las elecciones, con un despectivo “los otros no saben”.

Ante tanto desparpajo del Partido Popular y la autoloa de sus logros, no podemos dejar en el tintero que el 92% de los ciudadanos considera que en el momento actual existe mucha desigualdad económica y el 72% que va a continuar en esos niveles aún durante mucho tiempo, según el Barómetro de Confianza  en la Economía de  Metroscopia. Así mismo, desde que comenzó la crisis la brecha entre ricos y pobres ha aumentado de forma considerable, pues la cifra de multimillonarios se ha duplicado en nuestro país (cerca de 500 españoles declaran un patrimonio de más de 30 millones de euros, mientras en 2.007 eran 230). Y según la última Encuesta de Condiciones de Vida publicada por el Instituto Nacional de Estadística, algo más de 13 millones de personas, en su mayoría menores de 16 años, están en riesgo de exclusión social, ya sea porque no tienen ingresos o porque los que tienen no les dan para vivir con condiciones suficientes de acomodo. En resumen, que España saldrá de la crisis más pobre y más desigual. Luego, señores Rajoy y Montoro, menos lobos.

MIGUEL ÁNGEL VICENTE MARTÍNEZ

8 DE JUNIO 2016

 

 

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios